Formas baratas y efectivas de insonorizar un cuarto

Un cuarto a prueba de sonido te permitirá practicar tu instrumento favorito sin molestar a los demás.

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Un insonorizado barato que puedes hacer tú mismo puede parecer una idea descabellada, pero en realidad, no es una tarea imposible de lograr. Aunque no alcanzarás el mismo nivel de insonorización que una instalación profesional lograría, con algunos trucos y conocimiento básico, puedes disminuir una gran porción del sonido que sale y entra de tu habitación.

Fuga de sonido y reflexión

Cuando consideres hacer un cuarto a prueba de sonido, primero piensa qué condiciones del espacio causan que sea ruidoso. Los materiales como piedra, madera y concreto reflejan el sonido, y las áreas con muchos de estos materiales expuestos serán más ruidosas que aquellas que tienen alfombras o telas. Las paredes de yeso, aunque reflejan algo del sonido, no permiten mucha filtración de sonido a través de ellas, debido a cómo están montadas. Las puertas y ventanas están entre las fuentes más grandes de filtración de sonido, porque por lo general son más delgadas que las paredes, y usualmente están rodeadas por agujeros sin sellar.

Telas y alfombras

Las telas y alfombras absorben bien el sonido, y son la forma más fácil y barata de ayudar a insonorizar una habitación. Cuelga tapices o telas simples y pesadas para agregar una capa de absorción de sonido a tus paredes. Cuelga cortinas sobre las paredes o ventanas, y considera múltiples capas de tela. Los tapetes, especialmente con paneles gruesos de alfombra, también son efectivos para bloquear y disminuir el sonido. Coloca tela o espuma en las grietas y espacios alrededor de las puertas y ventanas para reducir significativamente los niveles de sonido que entran y salen de la habitación. Este tipo de insonorización es genial para habitaciones que generan una gran cantidad de sonidos fuertes, y donde necesitas mantener las filtraciones y reflexión de ruido al mínimo.

Texturizado de paredes

Los texturizados en aerosol y montados en las paredes agregan una capa de protección contra el sonido a las paredes, para evitar que los ruidos entren o se escapen a través de la pared. Los paneles de texturizado pueden ser montados en la pared con tachuelas o pegamento, o un texturizado de espuma puede ser rociado en la pared y secado. Busca en las tiendas de remodelación cercanas o en internet varias opciones de texturizado. Estos vienen en parches, corrugado y otros tipos. El texturizado para pared funciona mejor en áreas en las que necesitas poca cantidad de insonorización, y no debe ser tu única solución si estás tratando de bloquear sonidos fuertes, como prácticas de música o bebés que gritan.

Cartones de huevo y paredes de yeso

Otra forma de agregar una capa económica de insonorización a una habitación es engrosar las paredes utilizando paredes de yeso o cartones de huevo. Compra planchas de yeso en las tiendas de remodelación, y móntalas en las paredes con pegamento. Este proceso engrosa las paredes considerablemente, y agrega una excelente capa de contención y absorción de sonido. El otro método es tomar cartones de huevos y sujetarlos a las paredes con tachuelas o pegamento, luego cubrirlos con un material pesado, como una tela gruesa o plástico sólido. La forma única de los cartones de huevo reduce los niveles de sonido hacia dentro o hacia afuera de la habitación, y la cubierta agrega una capa extra de insonorización. Este tipo de material de insonorización es bueno para ruidos de bajo nivel y para evitar que los sonidos moderados (televisión, radio, etc.) escapen de la habitación.

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