Patas pegajosas y cuerpos planos

Las almohadillas de los dedos pegajosos de geckos le da la posibilidad de subir azulejos, vidrios y paredes verticales o arrastrarse boca abajo en el techo. Crecen de 3 a 6 pulgadas (de 7 cm a 14 cm) de la nariz hasta la cola y tienen cuerpos planos que se adhieren cerca de la superficie. Los geckos entran y salen fácilmente de las casas y otras estructuras por debajo de las puertas, alrededor de artefactos de iluminación y por pequeñas grietas alrededor de las ventanas y rejillas de ventilación. En general, los geckos duermen durante el día bajo las lámparas, en grietas oscuras y esquinas.

Hábitos de alimentación y caza

Los geckos comen casi cualquier insecto si está vivo y puede atraparlo. Las polillas y otros insectos revolotean en las ventanas y artefactos de iluminación en la noche, lo que hace el terreno de caza ideal para los geckos. Estos reptiles comen mosquitos, moscas, escarabajos, libélulas, cigarras, hormigas, avispas, mariposas y grillos. Cazan principalmente en la tarde y en la noche, pero no es raro verlos cazar durante el día, especialmente en habitaciones con poca luz.

Control natural de insectos

Las casas atraen insectos como termitas, hormigas y moscas que se reproducen y viven en paredes y muebles. Los insectos atraen a depredadores como las arañas. Una población sana de geckos ayuda a mantener las poblaciones de insectos bajas dentro de una casa. Las arañas son arácnidos predadores que viven donde hay una fuente de alimento. Los geckos no solo comen arañas, sino que también ayudan a controlar sus fuentes de alimento. También comen larvas de insectos, sobre todo la larva de la avispa del papel.

Mantener a los geckos afuera

No a todo el mundo le gusta compartir su casa con los geckos. Si vives en un área donde los geckos se encuentran en el entorno natural y deseas mantenerlos afuera de tu casa, la mejor manera de hacerlo es mantener a los insectos afuera. Coloca mosquiteros en todas las ventanas y mantén las puertas y ventanas cerradas. Pon guardias debajo de las puertas y apaga las luces en la noche. Para evitar que entren, sella los agujeros alrededor de las ventanas y rejillas de ventilación. Atrápalos con trampas humanitarias y sácalos. Estos animales son inofensivos para los humanos y se alimentan de insectos, lo que los hace buenos compañeros de casa.