Método

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Las lechugas germinan a temperaturas de entre 70º y 75º Fahrenheit (21º a 23º Celsius). Cuando plantes tu lechuga en el otoño, es importante esperar a que la temperatura baje más de 80º F (26º C) para plantarla, o si no la semilla quizás se pudra. Muchas de las semillas de las lechugas son sensibles a la luz y solo germinan si están cerca de la superficie del suelo, por lo que a menudo salen de la tierra en lugar de enterrarse más.

Tiempo

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Puede tomar desde unos cuantos días hasta casi un mes para que la lechuga germine, dependiendo de las condiciones climáticas y la clase de lechuga. Luego, toma otras dos semanas después de la germinación para que la lechuga esté lista para transplantarla. Los expertos recomiendan esperar hasta que la lechuga tenga cuatro capas de plantas.

Problemas

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Las lechugas necesitan mucha agua para crecer y, cuando no hay humedad suficiente, es común que la cosecha falle. Sin embargo, ya que las semillas están muy cerca de la superficie, el riego de la planta debe hacerse lenta y cuidadosamente; puedes rociar un poco de agua en una bandeja que esté por debajo de la planta. La germinación de la lechuga también puede fallar si la semilla es vieja así que usa semillas frescas cada temporada.

Consideraciones

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La semilla de la lechuga a evolucionado a tal grado que solo germina hasta que se encuentran en las condiciones adecuadas para crecer. Si tu lechuga se está demorando en germinar asegúrate de que le estás dando el agua, la temperatura y la luz suficientes para garantizar su crecimiento. Si plantas la lechuga directamente en el jardín, existe la posibilidad de que las aves o alguna otra especie se la coma. Inicia plantando dentro de tu casa ya que es más difícil darle seguimiento a la planta si está afuera.