Tomates y pimientos

Existen varios tipos de tomates, como el cherry, uva y pera, así como diversos pimientos, incluyendo el de cayena, jalapeño, campana y plátano, de entre los que puedes elegir para crear un jardín a pleno sol. Además de necesitar mucha luz solar, los tomates y pimientos también requieren mucha humedad y un suelo bien drenado. El agua es especialmente importante durante la época de floración de los cultivos. También se puede aplicar mulch para ayudar a mantener el suelo húmedo. Los tomates y pimientos deben plantarse después de las amenazas del invierno y cuando las temperaturas nocturnas permanecen cerca de los 55 grados Fahrenheit (12,77 grados Celsius) o más.

Calabazas y calabacines

Las calabazas y calabacines pueden cultivarse fácilmente usando sus semillas pero no deben ser sembrados sino hasta que la amenaza de las heladas y las temperaturas del suelo hayan alcanzado al menos los 68 grados Fahrenheit (20 grados Celsius). Además de necesitar pleno sol estas verduras responden bien a la cal, la cual puede ser añadida a tu tierra si es necesario. También necesitan aproximadamente una pulgada (2,54 cm) de agua semanalmente. Entre las variedades de calabaza sugeridas para pleno sol se encuentran la calabaza miniatura 'baby bear' o la 'autumn gold', la 'Jumpin' Jack' y las calabazas para Halloween 'big moon'. Entre los calabacines sugeridos se encuentran la 'queen acorn' de mesa, la 'zenith' y la 'puritan butternut', el espagueti vegetal, el zucchini embajador y la 'sundance crookneck'.

Remolachas

Las remolachas necesitan mucho sol pero no demasiado calor. Se cultivan mejor en temperaturas que van entre los 60 y 65 grados Fahrenheit (15,55 a 18,33 grados Celsius) o incluso más frías. Dado que las remolachas son un cultivo de raíz, el suelo debe estar blando, libre de piedras y raíces y bien drenado. Las remolachas son sensibles al ácido. Entre las variedades recomendadas se encuentran la 'Detroit dark red' la 'early wonder' y la 'albino white'.

Pepinos y guisantes

Los pepinos y guisantes necesitan gran cantidad de luz solar, pero los pepinos requieren muchas horas de calor mientras que los guisantes pueden crecer en temperaturas más frías. Los pepinos, ya sea que los cultives para cortarlos o para el decapado, crecen mejor cuando la temperatura se encuentra entre los 65 y 75 grados Fahrenheit (18,33 y 23,88 grados Celsius). Estos crecen en diversos tipos de suelo pero prefieren los que están bien drenados. Los guisantes pueden plantarse en la primavera tan pronto como puedas trabajar tu terreno para la siembra. Los guisantes usualmente se cosechan en la segunda semana de junio, y al igual que los pepinos requieren un suelo bien drenado.

Plantación en contenedor

Si no tienes el terreno para plantar un jardín de verduras soleado, los pepinos, calabacines, tomates y chiles pueden crecer en contenedores. Estos necesitarán colocarse en un lugar que reciba al menos ocho horas de sol diariamente y la maceta debe ser tan alta como ancha, con un diámetro mínimo de 12 pulgadas (30,48 cm). Entre las variedades sugeridas se encuentran el calabacín 'bush acorn', el zucchini 'black magic', el 'picklebush' o el pepino 'spacemaster', así como casi cualquier tomate o chile.