El calendario de Adviento

Originalmente, Der Adventskalender, o el calendario de Adviento, fue diseñado para que los niños pudieran participar en las festividades previas a la Navidad. El calendario de adviento, un invento alemán generalmente de cartón, tiene 24 pequeñas ventanas o solapas selladas diseñadas con una escena o motivo de Navidad. Los niños abren una ventana en cada uno de los 24 días previos a la Navidad. Cuando abren una ventana, pueden encontrar una sorpresa, como una imagen, un chocolate, caramelos o un juguete pequeño detrás de la misma. Hoy en día, la tradición del calendario de Adviento es celebrada en otras partes del mundo.

Día de San Nicolás

El día de San Nicolás (Sankt Nikolaus) se celebra en Alemania el 6 de diciembre. Otros países europeos lo celebran también, aunque no siempre en esa fecha. Los niños alemanes ponen zapatos o medias limpias delante de una puerta en su casa en la víspera del día seis. A la mañana siguiente, los niños buenos encuentran que San Nicolás ha llenado sus zapatos o calcetines con regalos como chocolate y dulces. Los niños que no se portan bien reciben una vara, una varilla flexible que se usa para azotar o disciplinar, que simboliza el castigo por su mal comportamiento. Esta es el similar a la tradición de los Reyes, que se celebra el 6 de enero, 12 días después de la Navidad, en algunos países como España.

Hoguera de Pascua

La hoguera de Pascua es una tradición alemana que tiene lugar en la noche del domingo de Pascua. Los niños alemanes encienden los viejos árboles de Navidad para crear una gran hoguera. Esta tradición se celebra en todo el país para dar la bienvenida al sol y a la primavera. En el pasado, se cree que este antiguo ritual pagano producía campos fructíferos y protegía a los hogares de la enfermedad. En la actualidad, es una reunión social que incluye una tradicional cena de Pascua con cordero, pollo y huevos.

El Conejo de la Pascua

Los huevos y los conejitos son dos de los símbolos más antiguos de Pascua en Alemania, que en el pasado, representaban la fertilidad y el nuevo nacimiento. Al igual que en muchos otros países, los niños alemanes buscan huevos y conejitos el domingo de Pascua. El Viernes Santo, los niños pintan los huevos de diferentes colores y diseños y los colocan en una cesta para Osterhase, o el conejo de la Pascua. Éste visita el hogar de los niños y oculta los huevos en la casa en la víspera del domingo de Pascua. A la mañana siguiente, los niños buscan los huevos y encuentran los dulces y regalos que deja el conejo de Pascua.