Cómo cambiar de maceta a un anturio

La mayoría de los anturios son rojos, pero también hay variedades amarillas, blancas y rosas.

Digital Vision./Photodisc/Getty Images

Las plantas tropicales anturio a menudo son más cultivadas como plantas de interiores, ya que en exteriores solo sobreviven en climas cálidos con inviernos suaves. Sus hojas son largas y brillantes con una inflorescencia roja que se encuentra en la cima de su alto tallo. Estás plantas florecen casi todo el año cuando se les cuida apropiadamente, y prosperan en habitaciones tibias cuando se les suministra la humedad adecuada y una fertilización mínima. Requieren ser cambiadas de maceta cada dos o tres años para que las raíces no se abarroten al ir creciendo la planta.

Step 1

Llena la nueva maceta con una capa de dos pulgadas (5 cm) de tierra para macetas. Ocupa una maceta una talla más grande que la anterior en que el anturio estaba creciendo; escoge una que tenga al menos un agujero de drenaje.

Step 2

Riega el anturio en su maceta actual hasta que el exceso de humedad drene por el fondo. Déjalo por 15 minutos para que la tierra esté completamente hidratada, lo que hará que removerla de la maceta sea más sencillo.

Step 3

Coloca tu mano sobre la parte superior de la maceta para que el anturio sobresalga entre tus dedos. Voltea la maceta y desliza la planta hacia afuera de la maceta mientras sostienes la parte de arriba con tu otra mano. Golpea los lados firmemente para aflojar la bola de raíces si se atora.

Step 4

Agita las raíces cuidadosamente, soltando el exceso de tierra. Carda cuidadosamente las raíces con tus dedos para aflojar cualquier raíz compactada.

Step 5

Coloca el anturio en su nueva maceta. Ajusta la cantidad de tierra debajo de las raíces hasta que la bola de raíces se asiente a 1 1/2 pulgadas (4 cm) por debajo del borde de la nueva maceta.

Step 6

Llena alrededor de las raíces con más tierra hasta que el anturio esté plantado a la misma profundidad que en la maceta anterior. Riega la tierra hasta que el exceso de agua comience a gotear del fondo de la maceta, asegúrate de que toda la tierra está uniformemente húmeda.

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