¿Por qué gotean las hojas de la Dieffenbachia?

La Dieffenbachia es una planta variegada de hoja perenne que presenta diversas combinaciones de colores.

Jupiterimages/Photos.com/Getty Images

La Dieffenbachia o diefembaquia, también conocida como “caña de tonto”, es una planta tropical de hoja perenne y vigoroso desarrollo que se suele cultivar como planta de interior. Produce unas hojas grandes y gruesas, a menudo variegadas formando rayas o manchas. La diefembaquia puede alcanzar una altura de hasta 6 pies (180 cm) y sus hojas pueden llegar a medir 19 pulgadas (48 cm) de longitud; no obstante, puede superar fácilmente estos promedios si el ambiente es óptimo. Tolera la sequía, pero no soporta tener la base mojada ni el exceso de riego, por lo que intentará solventar sus problemas de exceso de humedad con el goteo de sus hojas.

Gutación

La gutación es una reacción física que la diefembaquia experimenta tras sufrir un exceso de riego constante. Cuando la planta es regada excesivamente de forma regular, sus raíces comienzan absorber más agua de la que es capaz de procesar. Este exceso de agua será excretado en forma de savia a través de los filos de las hojas de la planta.

Control

El exceso de agua, junto con la luz escasa, favorece el desarrollo de la gutación. Para prevenirla, reduce los riegos de la diefembaquia, aumenta su exposición a la luz solar y favorece la circulación del aire a su alrededor. Coloca la planta en un lugar soleado y cálido en el que pueda disfrutar de la luz solar durante toda la jornada. Asegúrate de que el lugar esté bien ventilado y alejado de las corrientes de aire.

Agua

Deja que el suelo de la diefembaquia se seque ligeramente entre un riego y otro. Cuando comiences a notar la tierra seca al tacto, riega la planta profusamente a nivel del suelo. Vierte agua hasta que salga por los agujeros de drenaje del contenedor y luego deja que la tierra se seque nuevamente antes de volver a regar. Sigue este programa de riegos para evitar el exceso de humedad en la diefembaquia.

Cuidados

Trasplanta la diefembaquia cada una o dos estaciones de crecimiento, o cuando las raíces de la planta comiencen a apelmazarse en su contenedor de cultivo. Llévala a un terreno bien drenado y margoso. Nútrela regularmente con un fertilizante equilibrado durante la estación de crecimiento, desde principios de primavera hasta finales de otoño. Si la tienes en el interior, deja que la diefembaquia pase algún tiempo al aire libre durante su época de desarrollo, para favorecer el desarrollo saludable de los tejidos y aumentar la circulación del aire a su alrededor durante los meses secos y calurosos.

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