Cómo hidratar un gato enfermo

Asegúrate de que tu gato esté bien hidratado.

Comstock/Comstock/Getty Images

Si tu gato está enfermo, llévalo al veterinario para que reciba un diagnóstico y un plan de tratamiento. Muchas enfermedades felinas parecen un simple resfrío pero pueden volverse rápidamente una amenaza de muerte, haciendo necesaria una visita al veterinario. Al igual que en los humanos, uno de los aspectos más peligrosos de la enfermedad es deshidratarse. Un gato enfermo normalmente no estaría motivado para beber suficiente agua y mantener la hidratación adecuada. Por consiguiente, queda a criterio del propietario asegurarse de que el animalito permanezca hidratado. Sigue los siguientes pasos para asegurarte de que tu gato permanezca hidratado, lo que le dará la oportunidad de recuperarse completamente.

Step 1

Dale a tu gato líquidos sabrosos para beber, como caldo de pollo. El caldo de pollo tiene un olor apetitoso que lo convierte en una opción más atractiva que el agua. Algunos gatos enfermos no beben suficiente agua como para mantenerse hidratados, pero en cambio beberán el caldo.

Step 2

Fuerza a tu gato a que beba una onza (30 ml) de agua cada dos horas, si no lo hace por sí mismo. Usa una jeringa o un gotero para echar un chorro de agua en la boca de tu mascota. Detente inmediatamente y lleva el gato al veterinario si vomita luego de beber.

Step 3

Administra líquidos subcutáneos a tu gato. Haz esto usando una jeringa estéril y una bolsa de fluidos. Inyecta la aguja bajo la piel de tu gato entre sus escápulas. Mantenlo quieto mientras pasan 12 onzas (341 ml) de fluidos de la bolsa. El líquido se acumulará formando una burbuja entre las escápulas del gato y sus codos. Sólo realiza este procedimiento bajo la dirección de un veterinario.

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