Consejos para lijar y pintar una mesa de cocina

Debes trabajar con cuidado al restaurar una mesa de cocina.

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Rayas, astillas y manchas pueden arruinar la apariencia de una mesa de cocina. En lugar de comprar una nueva, puedes repintar la que tienes. El lijado y la pintura brindan una apariencia renovada a una mesa de cocina y es un modo de ahorrar dinero. Si dispones de una mesa que nunca ha sido restaurada, existen consejos y trucos que te permitirán ahorrar tiempo y evitarán frustraciones. Las mesas de cocina deben ser restauradas con cuidado, ya que el lijado o la pintura inadecuados pueden arruinar el mueble y poner tu salud en riesgo.

Limpieza

Antes de preparar la mesa para el lijado y la pintura, debes limpiarla con un detergente lavaplatos suave y agua tibia. Limpia la mesa con una esponja no abrasiva para eliminar la suciedad, los restos de alimentos y los desechos. Si la limpieza es inadecuada, el trabajo final puede presentar imperfecciones visibles. Enjuaga la mesa con agua limpia y deja secar antes de lijar la madera.

Eliminación de la pintura

Lijar toda la pintura vieja de la mesa puede llevar mucho tiempo. Usa un removedor de pintura para eliminar la mayor parte de pintura vieja de la mesa de cocina. Aplica el producto en un lugar bien ventilado y usa guantes y gafas de seguridad para proteger tu salud. Los decapantes de pintura que no requieren limpieza funcionan mejor cuando el objetivo es ahorrar tiempo. Siempre lee cuidadosamente las indicaciones del producto antes de usarlo para realizar una correcta aplicación. La mayoría de los disolventes deben permanecer sobre la superficie a tratar durante varios minutos para remover la pintura con efectividad.

Lijado

Toda la superficie de la mesa de cocina debe ser lijada antes de aplicar una capa de pintura fresca. El lijado permite que la pintura se adhiera de modo tal que no se descascare de la superficie. Siempre usa una mascarilla protectora y gafas cuando manipules una lijadora. Para mejores resultados, usa una lijadora orbital o de banda, ya que el lijado manual puede llevar mucho tiempo. Lija la mesa en la misma dirección de las vetas con papel de lija de grano 100 para eliminar la pintura y luego usa otro de grano 220 para terminar de alisar la superficie. Limpia el polvo de la mesa con un paño de adherencia.

Pintura

Antes de pintar, coloca una tela protectora debajo de la mesa y cubre los muebles cercanos. Aplica una capa de pintura base sobre la mesa antes de la pintura final para ocultar las imperfecciones y deja secar durante al menos una hora. Aplica la pintura deseada con un rodillo o una brocha y pinta en la misma dirección de las vetas. Para mejores resultados, primero debes dar vuelta la mesa y pintar sus patas. Una vez que las patas se sequen, vuelve a colocar la mesa en su posición original y pinta la superficie. Deja secar entre capas antes de aplicar más pintura. Es probable que debas aplicar dos o más capas en la mesa. La revista "Real Simple" recomienda guardar la brocha en una bolsa plástica dentro del refrigerador para evitar que se seque por completo.

Más consejos

Antes de elegir la pintura, determina si usarás pinturas oleosas o a base de agua. Las pinturas oleosas son más duraderas que las formuladas a base de agua, pero son difíciles de limpiar de brochas y demás superficies. Algunos prefieren usar pinturas acrílicas a base de agua porque son más fáciles de limpiar. Elige un color que combine con la decoración de la cocina. Si no puedes inclinarte por ningún color, opta por tonos neutros como negro, marrón o gris. Los colores brillantes proporcionan una apariencia acogedora a la mesa, en contraposición con los tonos oscuros y sombríos. Ten paciencia mientras pintas la mesa para evitar manchas y deja que el mueble se seque por completo antes de usar.

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