Verifica las políticas

Verifica el manual de tu escuela o trabajo respecto del código de vestimenta. Algunas escuelas y agencias profesionales o negocios pueden no permitir piercings visibles fuera de las orejas para las mujeres. Los piercings en la nariz, las cejas o la lengua pueden estar prohibidos. Debes saber esto antes de colocarte uno ya que sólo estarás gastando dinero si tu escuela o trabajo te ordena que te lo quites inmediatamente.

Visita las tiendas de perforaciones

Haz una visita a varias tiendas distintas para asegurarte de encontrar una que te parezca limpia y de confianza. Puedes preguntarle a amigos que se hayan colocado algún piercing para que te den sus recomendaciones, y para que también te hablen sobre sus experiencias.

Habla con tu médico familiar, ya que algunos médicos realizan perforaciones para asegurar que sus pacientes estén en un ambiente limpio y estéril, y obtengan las instrucciones correctas para el cuidado del piercing.

Investiga los riesgos

Existen muchos peligros para la salud asociados con los piercings cuando no se utilizan agujas estériles. Éstos pueden incluir hepatitis A, B y C, infecciones bacterianas, infecciones por estafilococos, o incluso VIH o SIDA. Asegúrate de pedirle a la persona que realiza la perforación que esterilice su equipo o pide mirar el proceso de esterilizado.

Investiga sobre los cuidados requeridos

Investiga el cuidado que se requiere para el tipo de piercing que deseas tener. Asegúrate de que sea algo que estés dispuesto a seguir. Por ejemplo, la mayoría de los piercings en las orejas cicatrizan dentro de las seis semanas, y pueden cuidarse simplemente girándolos diariamente y limpiando el área con una solución antiséptica especial provista por la persona que realiza la perforación.

Sin embargo, otros tipos de piercings, como los del ombligo, requieren de mucha más atención. Éstos son de los más difíciles para cicatrizar, y toman mucho tiempo, a veces hasta un año. Existen ciertas cosas que no puedes hacer al poco tiempo de la perforación, como nadar en el mar, debido a las bacterias, o bañarte en un jacuzzi, debido a los químicos. De modo que si estás pensando en perforar tu ombligo en la época de vacaciones, debes tenerlo en cuenta. También necesitarás lavar el piercing dos a tres veces al día con jabón antibacterial durante las primeras dos o tres semanas, antes de poder reducir la frecuencia a una vez a la semana por los siguientes meses.

Si no estás dispuesto a seguir el cuidado adecuado, debes volver a pensar en si te colocarás un piercing o no, ya que correrás el riesgo de contraer una seria infección.

¡Piénsalo bien!

Recuerda que un piercing es algo permanente. Incluso si no usas la joya y dejas que se cierre, tendrás una cicatriz, tejido cicatricial, pequeñas indentaciones en la piel o incluso un pequeño bulto en la zona en que éste estaba. Si estás considerando perforarte, habla con amigos que lo hayan hecho. Pregúntales si alguna vez se han arrepentido de su decisión. Asegúrate de investigar sobre los tipos de piercings y los distintos protocolos de cuidado. El piercing debe ser algo que realmente deseas, y no una decisión impulsiva.