Step 1

Coloca trozos de barras de acero verticalmente en los orificios centrales de los bloques de hormigón que forman la pared. Una vez que la barra de refuerzo esté en su lugar, tendrás que levantar los bloques a lo largo de la parte superior de la barra de refuerzo, por lo que será más fácil si construyes varios capas con bloques antes de insertar la varilla.

Step 2

Llena los huecos en los centros de los bloques con mortero. Haz esto después de haber reunido tres o cuatro hiladas de bloques. Coloca un pedazo de barra de refuerzo en el mortero. Mueve la barra de refuerzo hacia arriba y abajo para comprimir el mortero y sacar las burbujas de aire. Comprueba que la barra de refuerzo esté vertical con un nivel de 4 pies (1,2 m).

Step 3

Coloca más bloques en la pared después de que la barra de refuerzo esté en su lugar, levantándolos hacia arriba sobre la barra de refuerzo de modo que ésta quede dentro del centro de los agujeros. Después de asentar un bloque en la pared, llena los agujeros en los centros con mortero alrededor de la varilla y comprueba la varilla de nuevo para asegurarte de que sigue estando vertical.