Step 1

Reduce tu nivel de estrés. Un estudio del 2002 realizado en la Universidad Humboldt en Berlín por la Dra. Petra Clara Arck y por otros siete científicos encontró que los niveles elevados de estrés inhiben el crecimiento del cabello mediante la promoción de un desarrollo prematuro de catágena. Evalúa tu nivel actual de estrés y sé honesto contigo acerca de cuánto estrés tienes cada día. Toma clases de yoga o haz ejercicio diariamente para ayudar a reducir el estrés y sacar cualquier energía acumulada.

Step 2

Dale un masaje a diario a tu pecho. Al darle masaje a tu piel ayudas a promover la circulación sanguínea, y se usa normalmente para las personas que experimentan pérdida del cabello en la cabeza. Para comenzar, calienta un tazón pequeño de aceite y luego frótalo sobre tu pecho. Una vez que todo tu pecho esté cubierto, frótalo con un movimiento circular con tus yemas de los dedos. Haz esto de 10 a 15 minutos. También puedes aprovechar esta oportunidad para darte un masaje en el cuello o el cuero cabelludo, que puede ser muy relajante y ayudar a reducir el estrés.

Step 3

Toma más vitaminas. Según el mundialmente famoso experto en vitaminas, el Dr. George Obikoya, tu ingesta de vitaminas tiene un efecto mayor en cuán rápido y saludable crece el pelo en tu pecho. De hecho, una dieta que carece de nutrientes puede retardar o incluso detener, por completo, el crecimiento de pelo. La vitamina B, el beta-catoreno, la vitamina C y el aceite de linaza contribuyen al crecimiento normal del cabello. Puedes encontrar todas estas vitaminas en la comida de tu tienda local o en suplementos en una tienda de comida natural.