Step 1

Sacude la alfombra al aire libre para eliminar partículas de polvo y suciedad. Hazlo una vez por semana. Si se encuentra en un área muy transitada, puedes hacerlo tantas veces como sea necesario.

Step 2

Vuelve a colocar la alfombra sobre el piso. Aspírala en la misma dirección del pelo sin las escobillas en la aspiradora. Si lo deseas, la manguera para aspirar la alfombra, arrastrándola en la dirección del pelo. Aspira la alfombra tantas veces como sea necesario o una vez por semana.

Step 3

Quita los alimentos u otros elementos adheridos con el extremo sin filo de un cuchillo, raspando suavemente en la dirección del pelo.

Step 4

Limpia las manchas pequeñas con jabón suave y agua tibia. Frota suavemente la solución sobre la mancha con un cepillo suave. Seca con una toalla y quita toda la humedad posible.

Step 5

Usa un limpiador a vapor para dar una limpieza profunda a la alfombra. Al limpiar con vapor, sigue las indicaciones y no uses mucha agua. En vez de usar un voluminoso equipo para limpiar alfombras opta por un accesorio de manguera o un limpiador a vapor para telas. Mueve el dispositivo en la dirección del pelo.

Step 6

Coloca la alfombra sobre una silla o un tendedero, lejos de la luz solar directa, para refrescarla y deja secar por completo. Colócala con la parte posterior hacia arriba, de modo tal que los pelos queden hacia abajo y lejos del sol. Una vez seca, trasládala a un ambiente interior.

Step 7

Gira la alfombra cada tres meses para que el desgaste sea parejo.