El gas

Si tu estufa de gas no enciende, puede ser que no haya gas para que encienda la flama. El gas natural o el propano líquido llega a la unidad a través de la línea que se encuentra conectada a la válvula de gas. Asegúrate de que tu estufa esté conectada a esta y de que se encuentre abierta. Si es así, comprueba que el servicio de gas esté funcionando y de que no haya una interrupción.

La electricidad

Otro servicio de utilidad que tu estufa de gas necesita es la electricidad. Con ella se hace funcionar el dispositivo de encendido que crea la chispa para encender el gas. Asegúrate de que la estufa esté conectada a una toma eléctrica que funcione y que el fusible o interruptor correspondiente esté funcionando normalmente. Si es así, comprueba que el servicio eléctrico de tu casa esté funcionando.

Encendedor defectuoso

Otra razón por la que el encendedor podría no producir chispas para prender los quemadores, es por que podría estar defectuoso. El dispositivo de encendido puede tener un cortocircuito o simplemente puede no funcionar correctamente después de años de uso. Puedes quitar el defectuoso e instalar uno nuevo. Este proceso puede variar dependiendo del modelo de tu estufa, así que consulta el manual de servicio para obtener instrucciones específicas.

Ayuda

Si sabes o no lo que está mal con tu estufa de gas, puedes obtener ayuda en el número de servicio al cliente. Recuerde que si tu unidad aún tiene garantía, tratar de repararla tú mismo puede anularla. Por lo tanto, contacta el servicio al cliente del fabricante de tu estufa para solicitar el servicio. Si ya no tienes garantía, puedes intentar arreglar el dispositivo de encendido defectuoso por ti mismo, pero necesitas tener la pieza correcta para el modelo. Para solicitarla, así como el manual de servicio correspondiente, solo tienes que contactar al fabricante a través del servicio al cliente.