Buscando garrapatas

Después de una caminata por un bosque o un área con pasto, revisa a tu perro. Junta los elementos que necesitas, incluyendo una pinza y un recipiente lleno de jabón Dawn y amoníaco antes de revisar su pelaje. Ponte un par de guantes de goma y peina su manto meticulosamente para saber si tiene garrapatas. Pon atención en las zonas que están entre sus garras, alrededor del cuello, detrás de las orejas y los sobacos, porque estos son los lugares en los que estos insectos generalmente se esconden.

Removiendo y matando a las garrapatas

Crea una mezcla de 1 cucharada de jabón para platos Dawn, 1/4 de taza de amoníaco y 2 tazas de agua tibia en un recipiente de plástico. Pon el recipiente cerca tuyo mientras peinas a tu mascota. Una vez que has aislado a la garrapata, pásale un pompón de algodón empapado de aceite mineral. De acuerdo a Ventifo, esto hace que la garrapata se suelte de la piel del perro. Tómala inmediatamente con la pinza y sumérgela en el jabón con amoníaco. Continúa trabajando por todo el manto del animal hasta que no encuentres más insectos. Límpiale las heridas con una mezcla de 1 cucharada de jabón Dawn y 1 taza de agua tibia para evitar las infecciones.

Prevención de garrapatas

Trata a tu mascota con medicación tópica que le puedas aplicar detrás de su cabeza o ponle un collar para garrapatas. Evita las áreas con pasto y las boscosas cuando camines con tus animales, porque son las que pueden tener grandes poblaciones de garrapatas. También cuídate cuando estés jugando con tu perro afuera. Inadvertidamente tú le puedes pasar una garrapata. Corta el pasto de tu jardín regularmente, mantén las cercas y los arbustos bajo control y cuida que no se le prendan estos insectos a tu perro mientras juegas con él en tu jardín.

Las enfermedades de las garrapatas y los síntomas

De acuerdo a los Centros de control y prevención de las enfermedades los síntomas provocados por las garrapatas no se manifiestan hasta 21 días después de la infección. Incluyen pérdida del apetito, depresión, vómitos, infecciones de oídos y de la piel, fiebre, pérdidas por la nariz y la boca, incontinencia, púrpura, o sangrado debajo de la piel, e inflamación de las patas. Si tu perro sufre de cualquiera de estos síntomas habla con un veterinario inmeditamente. Si no lo tratas, la infección de garrapatas lo puede llevar a tener una falla renal, convulsiones, hemorragias y probablemente, hasta morir.