Separa todas las telas de 100 por ciento poliéster de otros tipos de materiales, incluso de mezclas con poliéstesr. Lava las prendas oscuras separadamente de las de color.

Aplica un removedor de manchas a cualquier prenda que tenga alguna. Asegura los botones, los cierres relámpago y los broches y da vuelta las prendas antes de colocarlas dentro de la máquina de lavar.

Coloca el ciclo de tu máquina de lavar en tibio para prendas tales como las camisas de trabajo y los uniformes o suave para mantas, batas, sábanas, materiales delicados de camisas o pantalones. Las prendas que digan "lavar a mano únicamente" deben lavarse en agua fría en el compartimiento de lavado a mano de la máquina de lavar, si es que está disponible, o bien lavarse a mano en la pileta o en la bañera.

Utiliza un detergente de calidad con blanqueador sin lejía siguiendo las recomendaciones del fabricante respecto del detergente. Nunca uses blanqueador con lejía en una prenda 100% poliéster. Si está opaco, el poliéster blanco puede sumergirse durante 15 minutos en la máquina antes de lavarlo con una taza de vinagre.

Retira de inmediato las prendas de la máquina de lavar una vez que haya terminado el ciclo.

Cuelga las prendas que se han recomendado lavar a mano afuera en un tender para que se sequen o sécalas adentro sobre un bastidor para prendas de tejido de punto. Seca a máquina las otras prendas a baja temperatura con una hoja para telas y retíralas de la secadora de inmediato para colgarlas antes de que se arruguen.

Desarruga la prenda con la plancha tibia, nunca caliente. El poliéster puede derretirse si se lo somete a altos niveles de calor, tanto en la secadora como bajo la plancha.