Cómo poner los pies en remojo en agua y vinagre

Poner los pies en remojo en agua con vinagre puede ayudarte a suavizar su piel y hacer que las callosidades y la epidermis muerta sean más fáciles de remover. El vinagre también mata los gérmenes y bacterias, ayudando a combatir el pie de atleta y los hongos. Remojar los pies en vinagre y agua es relativamente económico en comparación con otras soluciones similares y no requiere de otros ingredientes más allá de estas dos sustancias.

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Llena una cuba con 2 galones de agua tibia.

Agrega una taza de vinagre al agua. Puedes utilizar vinagre de manzana o vinagre blanco destilado; elige el que huela mejor para ti.

Pon tus pies en remojo durante 45 minutos.

Retira los pies del agua. Fricciona las áreas con problemas aplicando ligeros toques circulares con una piedra pómez. Enjuágalos y sécalos cuando hayas terminado.

Limpia la pieza pómez con vinagre después de cada uso.

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