Pelusas

Las pelusas o las concentraciones visibles de tela se pueden adherir a la microfibra por lo que debes evitar lavarlas con toallas o con otras telas con pelusa como el algodón. Debido a que el vellón puede generar estática, atrae y adhiere las pelusas fácilmente. Si necesitas quitarlas, usa el lado adhesivo de un trozo de cinta o compra un quitapelusas para hacerlo.

Pelotitas

Las pelotitas son diminutas masas de fibra que se forman en la superficie del tejido como resultado de la fricción. Lavar las sábanas de microfibra en agua caliente puede causar la formación prematura de pelotitas. En su lugar, lava las sábanas en agua fría, en un ciclo suave y déjalas secar al aire o hazlo en una máquina con un ajuste bajo de calor. Para minimizar aún más la posibilidad de que se formen pelotitas da vuelta la sábana y lávala con materiales similares. Puedes cortar la tela si no logras que las mismas se caigan naturalmente.

Residuos de detergente

El detergente seco puede acumularse y adherirse a la microfibra, incluso durante el lavado. Si usas un detergente en polvo para lavar la ropa, disuélvelo antes de agregarlo a la carga o disúelvelo en la máquina antes de agregar la microfibra. También puedes usar detergente líquido para minimizar los residuos sobrantes.

Calor y productos químicos

El calor y algunos productos químicos comúnmente usados para lavar la ropa pueden arruinar las sábanas por lo que debes evitarlos. El calor excesivo puede derretir la microfibra por lo que no debes planchar, prensar, usar vapor o hacer una limpieza en seco de tus sábanas. Además debes evitar el uso de químicos fuertes como la lejía o el suavizante de telas. La lejía puede arruinar los micro filamentos además de reducir la suavidad del tejido. El suavizante puede saturar las microfibras y obstruirlas esencialmente, lo que debilita la naturaleza repelente al agua del tejido.