Engrudos y ceras

Las pastas y las ceras son resistentes a la humedad y funcionan como una barrera a prueba de oxígeno entre el metal y los distintos elementos. Sin embargo, uno de los inconvenientes es que necesitan reaplicarse. La Automotive Paste Wax, por ejemplo, es uno de los productos para la maquinaria de metal que está diseñados para reducir la fricción entre los metales y actúan como una barrera.

Pintura anticorrosiva

La pintura anticorrosiva funciona de manera similar a las ceras y a los engrudos, pero no necesita reaplicarse constantemente. Prepara y limpia bien la superficie ya que hay que retirar toda la humedad y el herrumbre a fin de impedir que se quede atrapado debajo de la pintura. Acaba con la superficie de metal con un cepillo de alambre y asegúrate una buena adhesión. La pintura anticorrosiva se consigue muy fácil y también actúa como una barrera que no se raja o como una ampolla cuando se la aplica a las superficies de metal que están debidamente preparadas.

Aerosoles

Los aceites y lubricantes preventivos del herrumbre que vienen en aerosol funcionan bien con las herramientas y las partes de metal más pequeñas. El producto es ideal para las primeras porque, al mismo tiempo que no hace que quede resbaladizo, lo protege de la oxidación. WD-40, Starret M1, LPS-1 y LPS-3 son las marcas más comunes. Al igual que las pastas y las ceras, también se necesita reaplicación constante.

Capa de zinc

El baño de zinc, también conocido como galvanizado, se cree es uno de los mejores métodos preventivos contra el óxido en los metales. Se aplica siguiendo cuatro métodos: en caliente, galvanoplastía, en rociador o con pintura. El primero es el más común porque proporciona la capa de zinc más espesa y durable de todas. El galvanizado, aunque necesita ser hecho por un profesional, protege con excelencia al metal contra el herrumbre.