Cómo quitar las manchas bajo los ojos de los perros malteses

Mantener alejadas las manchas café de los perros malteses requiere de corte y limpieza frecuente alrededor de los ojos.

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Muchos perros pequeños de color claro, especialmente los de raza maltés, desarrollan con frecuencia manchas color café alrededor de sus ojos. Este es un problema cosmético bastante común causado por el exceso de lagrimeo sobre el área que rodea sus ojos. El color café surge cuando las bacterias de la cara interactúan con las lágrimas. La causa puede ser también un bloqueo en los conductos lagrimales. Las razas miniatura, como los malteses, frecuentemente tienen ojos prominentes que estiran el sistema de desagüe, lo que da como resultado unos conductos lagrimales que no drenan por la nariz y, en consecuencia, se acumula bajo los ojos. Las manchas color café son especialmente notorias en el maltés de pelaje blanco.

Step 1

Examina los ojos de tu perro y trata de determinar la causa del exceso de lágrimas. Las alergias, objetos del exterior, úlceras y condiciones médicas, como conductos lagrimales anormales, pueden causar una producción excesiva de lágrimas. Si sospechas que la causa es una condición médica, lleva a tu perro con un veterinario.

Step 2

Corta cualquier cabello largo alrededor de los ojos de tu perro. Estos cabellos se enredan fácilmente y pueden causar irritación de piel y posiblemente una infección. Limpia completamente el área del ojo y retira cualquier material crujiente con una toalla limpia. Si ves una lesión en la piel, corta el cabello cerca de ella y aplica pomada antibiótica oftálmica en el área. Ve con tu veterinario si la lesión parece infectada.

Step 3

Frota con una bola de algodón o una gaza empapada de producto limpiador de manchas lagrimales formulado para perros en el área; debes tener mucho cuidado para no salpicar producto dentro del ojo. Moja el área del ojo con agua tibia después de aplicar el producto. También puedes crear tu propio limpiador mezclando una cucharada de ácido bórico en un vaso de agua hervida, mézclalo bien, deja que se enfríe hasta que esté tibio y aplícalo con una bola de algodón o una gaza acolchada.

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