Actitud

Mantener una buena actitud y ser optimista sobre la vida y todo lo que tiene es una habilidad que te ayuda a ser un buen orador motivacional. Tu actitud positiva se contagiará a la audiencia y los entusiasmarás con tu presentación. Pero si tienes una actitud negativa sobre el material que estás presentando, se notará, y tu audiencia no quedará impresionada.

Presencia

Tener una buena presencia en el escenario es una parte importante de ser un orador motivacional. Se trata de asegurarte de que te vistes específicamente para cada presentación dependiendo del tema y la audiencia. También implica entusiasmar a tu audiencia y mostrarles a través de movimientos y gestos que estás entusiasmado.

Persuasión

Ser capaz de motivar y guiar a la gente a creer en ti y tus ideas, en otras palabras, tener habilidades de persuasión fuertes, es una gran parte de ser un buen orador motivacional.

Comunicación

Saber hablar bien es esencial para un buen orador motivacional. Si tu audiencia no te entiende, no estará motivada, ya que van a estar demasiado ocupados intentando averiguar de qué exactamente estás hablando. Es importante tener buena dicción y la habilidad de expresar tus ideas de una manera comprensible para la audiencia.

Conocimiento experto

Ayuda ser un experto y tener años de experiencia con el tema que estás discutiendo. Tienes que conocer, amar e investigar cada tema para el cual estás dando un discurso motivacional. Conocer a fondo y comprender un tema mejorará tu credibilidad con el público.