Gemido

Uno de los ruidos más comunes escuchados del inodoro es un gemido, casi como que el inodoro está jadeando en busca de aire. Este sonido se escucha con más frecuencia durante la noche y sucede cuando la presión del agua se incrementa en los sistemas de agua municipales. El sonido no es causado por la presión creciente del agua, sino por la presión que pone demasiada tensión en una válvula de flotador desgastada o desalineada. A medida que envejece el flotador, pierde su flexibilidad y vibra cuando se presiona, generando el gemido. La compra de una válvula de flotador y de una válvula de llenado nuevas resolverá ese gemido que suena todas las noches desde el inodoro.

Gorgoteo

Aunque un sonido de gorgoteo ligero es normal durante y poco después de tirar de la cadena, un gorgoteo constante después de tirar por lo general indica que el respiradero está obstruido. Se crea cierta succión en la tubería después de la descarga y la presión de dicha succión se alivia con otro tubo que ventila desde el exterior de la casa. Si este tubo de ventilación se obstruye, la succión se acumula y el aire es forzado a través del sistema de tuberías junto con el agua, causando un ruido de gorgoteo. Destapar el ventiladero resolverá este problema.

Silbido

Un inodoro que silba mientras funciona, se debe muy a menudo a un montaje viejo de válvula de llenado y flotador. Los sistemas más antiguos se llenan mucho más lento que los nuevos y, algunas veces, la cantidad de presión de agua puede aumentar hasta un punto en donde el flotador se abre lo suficiente como para causar un ruido de silbido durante el llenado después de una descarga. La renovación de los mecanismos internos del retrete, incluyendo una válvula de flotador y una válvula de relleno, eliminará el silbido.

Goteo

El goteo, al igual que el gorgoteo, también es normal por un período corto después de la descarga. Pero uno que dure más de un minuto o dos es una señal de avería en el sistema sanitario. Este problema es generalmente el resultado de una pequeña fuga en la aleta de descarga, causado ya sea por una cadena atorada en alguna parte del montaje o por una grieta en el asiento de la válvula o el flotador. Este problema es particularmente costoso puesto que la fuga, si se permite que continúe, puede desperdiciar hasta 120 galones (455 l) por hora tratando de llenar el tanque.