Síntomas del parto canino
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Al igual que en los seres humanos, el trabajo y el proceso de parto en las perras puede ser difícil y aterrador. En las perras, la gestación dura alrededor de 63 días, mucho más corta que en los seres humanos. Normalmente, el parto se produce unos 58 a 70 días después de la concepción, pero puede ser difícil determinar el momento de la concepción, a menos que sepas exactamente cuándo fue fecundada la perra. Los primeros signos y síntomas del parto pueden no ser muy notables. En las etapas posteriores, sin embargo, se hace mucho más evidente.
Temperatura corporal
Antes de parir, la temperatura corporal de una perra se reducirá considerablemente. La temperatura promedio para un perro es 101.5 grados Fahrenheit (38.6 grados Celsius). Aproximadamente un día antes de comenzar el trabajo de parto para alumbrar los cachorros, la temperatura de la perra se reducirá 1 o 2 grados.
Cambios de comportamiento
A medida que la perra entra en las primeras etapas del trabajo de parto, puede parecer nerviosa o inquieta. Ella podrá dar vueltas o jadear, y puede negarse a comer su comida. También puede comenzar a anidar, lo que normalmente implica recolectar mantas u otros tejidos blandos para crear una cama para los cachorros. Es una buena idea crear un área de parto, como una caja o en una esquina llena de mantas o periódicos.
Contracciones
Al igual que en los seres humanos, las perras experimentan fuertes contracciones uterinas que se preparan para dar a luz. Durante estas contracciones, el abdomen estará notablemente apretado y tenso. Generalmente, el primer cachorro nacerá enter una o dos horas a partir del inicio de las contracciones. Si un cachorro no ha nacido después de dos horas, la perra puede necesitar la ayuda de un veterinario. Todos los cachorros deben nacer dentro de aproximadamente cuatro horas desde el comienzo de las contracciones o puede ser necesario llamar al veterinario. Es normal que la perra descanse después de parir cada cachorro.
Otros síntomas
Otras señales de que tu perra puede estar en trabajo de parto y lista para parir a sus cachorros incluye vómitos y escalofríos. También puede repentinamente parecer dependiente y apegada porque está buscando a alguien que la consuele durante el difícil proceso del parto.
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Referencias
Sobre el autor
Anna Aronson began working as a journalist in 2000 and spent six years at suburban Chicago newspapers before pursuing freelance work. She enjoys writing about health care topics, in particular obstetrics, pediatrics and nutrition. She received a Bachelor of Arts in journalism from Eastern Illinois University and is now studying for a Master of Science in medicine degree to become a physician's assistant.
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