Usos del tomate
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El tomate es un ingrediente absolutamente esencial en la dieta mediterránea. Lo usamos todo el año aunque su época es el verano. En la cocina, resulta imprescindible para elaborar salsas y para alegrar las ensaladas. Pero el tomate tiene muchos más usos y la peculiaridad de que no sólo es versátil sino que además es muy fácil de preparar. Escoge un buen tomate, la diferencia de sabor es abismal. Si puedes, busca que sea ecológico, sin pesticidas ni contaminantes: tu organismo no necesita más tóxicos. A continuación, puedes ver varias propuestas sencillas para dar otro toque al tomate.
Overview
Tomates rellenos
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Deliciosos como entrante o como primer plato, los tomates rellenos se pueden servir fríos, calientes o templados. De fácil elaboración, los puedes preparar al horno o simplemente escaldándolos en agua hirviendo. Admite todo tipo de rellenos, desde los más sencillos como romper un huevo y meterlo al horno, hasta rellenos más elaborados como arroz con piñones y calabacín o setas. Son muy vistosos, por lo que el impacto en la mesa es muy llamativo.
A la plancha
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La mejor variedad de tomate para elaborarlo a la plancha es el tomate pera. Son unos tomates alargados y con poco corazon. Córtalo en rodajas y ponlos en la sartén o en la plancha, siempre después de haberla untado bien de aceite, de lo contrario se agarrarán. No te preocupes si se te doran demasiado, incluso un poco requemados quedan deliciosos.
Pisto
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El pisto o ratatouille es un plato de inspiración mediterránea lleno de vitaminas y minerales. Queda delicioso tanto para comer como primer plato con cuchara, como sobre una tosta de pan, sobre una pizza o una patata asada. El pisto es mejor comerlo caliente o templado. Sus ingredientes, además del tomate natural, son pimiento, cebolla y calabacín, todo salteado. Puedes usarlo también como acompañamiento de un pescado, carne o morcilla.
Sopa de tomate
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Nada más delicioso que una sopa de tomate natural. No intentes hacerla con tomate enlatado porque el resultado no tiene nada que ver. Toma tomates naturales, escáldalos en agua hirviendo, pélalos y trituralos. Añade un poco de caldo vegetal y si necesitas espesarlo un poco usa tapioca o sémola de arroz. Sirve caliente.
Zumo de tomate
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El tomate es rico en vitaminas y por eso un delicioso zumo de tomate, fresquito, es ideal para reponernos en verano de las altas temperaturas. Únicamente debes tener cuidado con el tomate si eres propenso a sufrir dolores musculares o artritis, pues el tomate es una planta solanácea y como tal, susceptible de incrementar los dolores a las personas sensibles. Cuidado también si tienes los riñones algo sobrecargados. Al tomarlo en zumo tomas más del habitual y tu organismo puede resentirse.
Gazpacho
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El gazpacho, delicioso, fácil de hacer y muy refrescante, es uno de los platos que nunca faltan en verano. El gazpacho se hace combinando tomate fresco maduro con algo de pimiento crudo, un toque de ajo fresco y pan, todo frío y batido en batidora. Hay quien le añade piñones, un toque de hierbas o aceitunas. Le puedes incluso poner unos hielos para que se mantenga frío hasta el final
A la brasa
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El tomate también resulta delicioso a la brasa, acompañando una barbacoa. Para ello escoge la variedad "Cherry" que son tomates enanos. Simplemente lávalos, insertalos en brochetas acompañados de pimientos o champiñones y vete girándolos sobre las brasas para que se asen uniformemente. Espera a que las brasas no estén muy fuertes para hacerlo.
"Pa amb tumaca"
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El "pa amb tumaca" es un plato catalán muy conocido, sencillo de elaborar y sabroso. Toma una rebanada de pan de pueblo, tuéstala hasta que quede bien crujiente y frota un diente de ajo sobre la miga. Después, echa aceite virgen extra encima y coloca rodajas de tomate fresco. Espolvorea sal por encima y ya está. Usa una sal rica y sabrosa para un mejor resultado. Puedes colocar jamón serrano entre el pan y el tomate o prescindir del ajo si lo prefieres, está igualmente rico.
Mermelada de tomate
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Otra manera de preparar el tomate es como mermelada. Agridulce, ideal para acompañar entremeses o tostadas. Se prepara igual que todas las mermeladas. Debes primero pelar los tomates y luego pesarlos, cortarlos en trozos pequeños y dejar doce horas en el frigorífico junto con el mismo peso en azúcar. Transcurrido ese tiempo, hazlo a fuego lento sin dejar de remover hasta que quede de la consistencia deseada.
Desecados
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Los tomates desecados los puedes hacer en casa dejándolos en el horno a 30º durante 24 horas o mejor aún con un deshidratador. También puedes comprarlos. Se emplean en varias recetas como por ejemplo para elaborar pan o para hacer salsas para pasta. En este último caso es necesario rehidratarlos sumergiéndolos un rato en agua templada o en aceite. Experimenta con ellos pues son versátiles y sirven incluso para preparar "muffins".
Sobre el autor
Miriam Orella es Titulada superior en Protocolo y Relaciones Institucionales por la escuela Internacional de Protocolo de Madrid. Escritora premiada, imparte clases en su ciudad natal (Pamplona) a la par que publica relatos (Relatos de Mujeres Viajeras, Madrid 2011; Archivos del Sur (Argentina); Sagrario Resano” (2008, Pamplona); e-book "1 entre 10 millones, Coca-Cola España, 2010; Internacional Bonaventuriano de Cuento. Universidad de San Buenaventura Cali. Colombia, 2011, etc. Tambien elabora manuales de formacion y manuales de protocolo como freelance.
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