Fortalezas y debilidades de un programa de educación especial

Los programas de educación especial ayudan a los estudiantes con discapacidades.

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Los programas de educación especial dan educación especializada para satisfacer las necesidades de los estudiantes con discapacidades y problemas de aprendizaje. La Ley para la educación de individuos con discapacidades (IDEA, por sus siglas en inglés), requiere que las escuelas ofrezcan servicios para niños y jóvenes con discapacidades, incluyendo programas de educación especial. Los programas de educación especial toman múltiples formas, y cada una de ellas tiene sus propias fortalezas y debilidades.

Tipos de educación especial

Los programas de educación especial entran en dos tipos generales: inclusión y exclusión. La inclusión significa que los estudiantes reciben todos los recursos para su educación especial en un salón de clases estándar. Los programas de inclusión parcial hacen que los estudiantes tomen algunas materias con estudiantes estándar y otras materias en un salón de clases de educación especial. En los programas de exclusión, los estudiantes de educación especial aprenden en lugares especializados y no interactúan con estudiantes de educación estándar.

Fortalezas de los programas de inclusión

A través de IDEA, se pide a las escuelas que consideren un programa de inclusión para los estudiantes de educación especial. Integrar a los estudiantes a un salón de clases estándar, al menos por una parte del día escolar, les da la oportunidad de mejorar sus habilidades sociales. En un lugar de educación estándar se garantiza que los estudiantes van a recibir educación de acuerdo a su grado escolar. Los programas de inclusión también son benéficos para los maestros, ya que requieren que aprendan nuevas estrategias de enseñanza para llegar a los estudiantes de educación especial. El beneficio de los programas de inclusión para los estudiantes estándar es aprender a interactuar con personas con discapacidades.

Debilidades de los programas de inclusión

Algunos estudiantes con discapacidades mayores o con problemas de conducta no pueden funcionar en un salón de clases estándar y no son beneficiados por un programa de inclusión. Si los estudiantes de educación especial se ubican en salones de clases estándar con muchos alumnos, puede ser difícil para los maestros asistirlos y darles la atención individualizada que necesitan para aprender efectivamente. Los programas de inclusión a menudo son costosos porque, en muchos casos, se necesita de personas que acompañen a los estudiantes de educación especial a sus salones de clases.

Fortalezas de los programas de exclusión

Para los estudiantes con discapacidades mayores, un programa de exclusión les ofrece un ambiente seguro donde no temen quedar en ridículo o no ser entendidos. Los maestros en lugares de exclusión están entrenados especialmente para tratar con estudiantes con todo tipo de discapacidades, mientras que los maestros en un salón de clases estándar a menudo requieren un entrenamiento extra para poder enseñar a los estudiantes de educación especial. Los programas de exclusión ofrecen clases con pocos alumnos donde los estudiantes reciben indicaciones especializadas de acuerdo a su nivel, más que a su grado escolar esperado, y reciben recompensas por el progreso que logran.

Debilidades de los programas de exclusión

Los programas de exclusión alejan a los estudiantes de educación especial de los niños de su edad y de los estudiantes en general, lo que a menudo causa exponerlos al ridículo cuando se encuentran con estudiantes estándar. Los estudiantes aprenden a un nivel más bajo en los programas de exclusión, y es común que no tengan la oportunidad de recibir enseñanza superior para mostrar lo que saben. Los programas de exclusión también son costosos, porque los salones de clases con poco alumnos requieren de más asistentes y maestros para trabajar con los estudiantes de forma individual.

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