Adaptaciones de la lechuza común

Pueden rotar su cabeza 270 grados.

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La lechuza común vive en todos los continentes del mundo a excepción de la Antártida. Tiene un ancho de ala de 33 pulgadas (83,82 centímetros) pero el cuerpo es pequeño en comparación; sólo 14 pulgadas (35,56 centímetros) de la cabeza a las punta de las plumas de la cola. La lechuza común tiene varias adaptaciones que le ayudan a cazar sus presas y eludir depredadores.

Rostro y orejas

Estos pájaros tienen un rostro con forma de corazón que les ayuda a agarrar a sus presas y dirigir los sonidos hacia las orejas. Además tienen un oído mas arriba que el otro. De acuerdo con Barn Owl Trust, esto les permite procesar separadamente los sonidos porque las lechuzas los pueden escuchar diferentemente en cada oído. La lechuza común puede localizar el punto de origen de un sonido, lo cual le ayuda a cazar la presa, y puede, además, bloquear los ruidos innecesarios y enfocarse en los de la presa.

Alas y plumas

La lechuza común tiene alas grandes en comparación con su cuerpo, lo que se conoce como carga de ala baja. Debido a esto puede volar lento y hasta no avanzar en el vuelo más fácilmente que otras aves, lo que le da la posibilidad de encontrar a su presa desde el aire. Según la Reserva Natural del Desierto Alice Springs, sus plumas tienen adaptaciones especiales que les permiten hacer vuelos silenciosos: en los bordes de las alas, las plumas tienen pequeños cabellos y las plumas del cuerpo son suaves, cortando el sonido del viento y otros sonidos indeseables.

Coloración

La coloración de la lechuza común es una adaptación que la provee de camuflaje por su parte dorsal y ventral. La parte dorsal es marrón clara como las áreas por donde caza. Esto significa que es más difícil de ver desde arriba y esto la hace menos susceptible a los ataques de aves más grandes. El lado ventral de la lechuza común es blanco, Haciendo más difícil de ver su la silueta contra el cielo y por ende, ser cazada por animales terrestres.

Ojos y garras

Según el Brown Owl Trust, los ojos de la lechuza común son el doble de sensibles a la luz que los de los humanos. Por lo tanto poseen una excelente visión con poca luz, facilitando la cacería nocturna. Sus ojos son bastante más sensibles que los nuestros al movimiento por lo que notan de inmediato cuando algo comienza a moverse. Este pájaro tiene patas y garras más largas que las de las demás lechuzas, de manera que puede cazar en terrenos altos. Sus garras son afiladas y las usan para matar a la presa.

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