Compañerismo

Uno de los beneficios principales que los niños ofrecen a los ancianos es la compañía. Este es el caso especial cuando las personas mayores ya no viven más en sus hogares sino que se han movido a asilos o a ambientes de asistencia para vivir. Los viajes de día a la biblioteca, a parques o a hoyos locales de pesca, hacer juegos de mesa y videojuegos y cartas permiten a los niños y ancianos a unirse mientras participan de actividades recreativas. El anciano también puede ser tutor de un niño en algún tema de la escuela. Estas actividades pueden ayudar a dar a los ancianos un sentido de gozo y propósito.

Compartiendo experiencias

Los ancianos tienen una gran cantidad de conocimiento para ofrecer a los jóvenes. Al compartir su sabiduría y conocimiento con los niños, pueden sentirse renovados, libres del aburrimiento o incrementar su vitalidad. Estos sentimientos positivos pueden aumentar cuando un anciano comparte un interés o pasión, como la pesca o manualidades de costura, con un niño.

Regalando

Los niños en ocasiones ofrecen regalos hechos a mano en casa o en la escuela a los ancianos que visitan. Recibir regalos como zapatillas de casa, almohadas, sábanas o hasta flores, puede hacer sentir a los ancianos valorados y recordados, de acuerdo con el Proyecto Legacy (elder-one-stop.com) que funciona con niños, adolescentes, adultos y ancianos para explorar las conexiones entre las generaciones.

Juegos

Los niños pueden llevar videojuegos en sus visitas y puede haber más beneficio en estos juegos que tan solo diversión. El sitio web Elder One Stop (elder-one-stop.com) sugiere que los juegos mejoran las habilidades cognitivas entre los ciudadanos mayores. Estas funciones incluyen, pero no son limitantes "factores mentales" como "razón, imaginación y memoria". Mientras que condiciones como la demencia están parcialmente relacionadas con la genética y la dieta, pueden ser provocadas por una falta de actividad, de acuerdo con el sitio. Los niños al llevar lo último en tecnología de juegos pueden estimular la mente, el espíritu y la actitud del anciano, ayudándole a sentirse joven.