Cómo hacer caramelos de salvia

La salvia pareciera ser una planta milagrosa por servir para aliviar distintos tipos de problemas de salud.

labioguía

La salvia pareciera ser una planta milagrosa por servir para aliviar distintos tipos de problemas de salud. Y es que una pequeña rama sirve para preparar remedios caseros muy efectivos para afecciones que van desde gripales, de garganta, afonía o resfriado; a estomacales, digestiones pesadas, diarreas, gastritis o malestar estomacal producido por los nervios; incluso menstruales, aliviando sus principales molestias como lo son dolores de vientre, de cabeza o retención de líquidos; e incluso sirve para curar heridas o úlceras por su efecto cicatrizante.

Baja los niveles de azúcar

Además, infusiones de esta yerba sirven para bajar los niveles de azúcar, lo que la hace efectiva también en pacientes diabéticos y es recomendada para resolver problemas de insomnio. Y dado a los múltiples beneficios que este regalo de la naturaleza ofrece, puede convertirse en un remedio por excelencia para combatir malestares comunes de forma orgánica, sin acudir a tomar más pastillas de las que podamos necesitar.

Preparación

Es por eso que hacer caramelos de salvia son una excelente manera para llevar todos estos beneficios en un tamaño compacto a donde sea que vayamos. Se conservan bien por bastante tiempo, de hecho en recipientes herméticos puedes durar hasta un año. Para preparar estos caramelos necesitarás: • 100g de azúcar • 10 ramitas de salvia fresca o 5g de salvia disecada (según consigas)

Preparación

Primero debes preparar tu salvia. Si está fresca deberás lavarla y secarla dando toquecitos con un papel absorbente. Saca solo las hojas de salvia y córtalas lo más pequeño posible. Si tienes salvia disecada puedes pulverizarla con la ayuda de tu mortero. En una olla coloca los 100 gramos de azúcar a cocinar a fuego muy bajo, remueve periódicamente con una cuchara, preferiblemente de madera. Cuando tome un aspecto “liquido” dorado, agrega la salvia y mezcla otro rato.

Preparación

Sobre papel encerado vierte gotas de esta mezcla hasta lograr un tamaño de caramelo. No manipules el caramelo caliente, ya que es riesgoso y déjalo enfriar por sí solo, no intentes acelerar el proceso en la nevera. Al cabo de unas horas, tus caramelos estarán listos. Puedes guardarlos en un pequeño envase hermético o forrarlos con pedacitos de papel celofán o encerado para llevarlos en la cartera o regalar. Cuando sientas alguno de los malestares mencionados anteriormente, come uno de los caramelos y verás cómo te alivias rápidamente.

eHow en espanol
×