Step 1

Elige tus quesos. Éstos siempre combinan bien con el vino, y la champaña no es la excepción de la regla. Diferentes quesos como el queso Gouda, el queso Brie, el queso Edam y el Cheddar suave, en cubos y rodajas harán que tu fiesta comience con el pie derecho.

Step 2

Tráelo fresco del mar. La champaña combina bien con camarón, langosta, ostras crudas, sushi y casi cualquier otro tipo de mariscos. El pescado crudo funciona especialmente bien con los aperitivos hechos con esta bebida.

Step 3

Descubre la relación amorosa que existe entre la champaña y la sal. Aunque es raro que sea la primera opción de alguien, este cóctel clásico va genial con los alimentos salados y fritos. Prueba combinar una copa de Brut con aperitivos de jamón envuelto, salchichas de cóctel, bocadillos a base de huevo, champiñones fritos o rangún de cangrejo.

Step 4

Combina la champaña con foie gras. Servir hígado de pato o pavo es una tradición en algunas culturas. Esta es, también, una combinación bastante cara.

Step 5

Sirve aperitivos a base de pollo con champaña. Las burbujas del vino espumoso suavizan el sabor del pollo cocido al vapor o al horno en pequeñas cantidades. Sin embargo, el pollo a la parrilla se superpondrá a la champaña.

Step 6

Selecciona fruta que puedas combinar con la champaña. Esta bebida siempre complementa el sabor de las frutas. Cuando sirvas una comida ligera, sirve fresas con pequeñas copas de champaña antes de la comida. O, considera hacer aperitivos de postre al final de la comida. Puedes servir la champaña con la mayoría de los postres.