Cómo comer hojas crudas de hinojo

Las hojas crudas del hinojo le añadirán un sabor fresco y crujiente a las ensaladas y a los sándwiches fríos. También puedes usarlas, cortadas junto con otras hierbas frescas, como guarnición y para añadirle un toque final de condimento a tus comidas. Estas hojas tienen un sabor fresco y anisado que complementará casi cualquier plato. Simplemente agrégales algunos condimentos, aceite, vinagre, y luego utilízalas como aderezo o cómelas crudas en ensalada.

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Enjuaga la suciedad y los residuos de los pesticidas de tu planta de hinojo, bajo el chorro de agua fría. Elimina o descarta cualquier material fibroso o dañado de las capas superiores. Cuando comes las hojas de hinojo crudo, debes ser selectiva y evitar usar las que están duras y descoloridas.

Coloca tu planta limpia sobre la tabla de cortar, utiliza un cuchillo afilado para quitar las hojas y deja a un lado el resto de la planta. Mueve el cuchillo hacia adelante y hacia atrás para cortar las hojas en trozos.

Recoge unos trozos de las hojas de hinojo y pruébalas para averiguar su potencia. Si tienen un sabor fuerte a anís, separa un cuarto de taza o utiliza media taza si este último es más sutil. Puedes comer las hojas adicionales solas o guardarlas en el refrigerador durante un par de días.

Quita el extremo de la raíz y los tallos del bulbo de hinojo y corta en pequeñas rodajas el centro crujiente de este. Con el bulbo duplicarás el sabor del hinojo crudo, y al utilizar ambas partes de la planta le añadirás complejidad a tu plato final.

Combina aceite de oliva extra virgen, jugo de limón y mostaza Dijon con un batidor. Añade las hojas de hinojo junto con las rodajas blancas del bulbo y mezcla con pinzas para ensalada.

Prueba tu ensalada de hojas de hinojo y agrégale sal y pimienta negra recién molida, a gusto. Para obtener un sabor menos amargo, agranda tu ensalada añadiendo algunas hojas picadas de lechuga roja y argula.

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