Prueba de harina

Para los métodos de cocción en seco sobre una sartén, espolvorea una capa uniforme de harina en el fondo de la sartén. Gira la hornilla del quemador a su temperatura media. Si después de cinco minutos, la harina en la sartén está marrón dorado, el quemador ha alcanzado una temperatura entre los 325 y 400 grados Fahrenheit. Un color más claro corresponde a una temperatura inferior y un color más oscuro significa más de 400 grados Fahrenheit. Prueba de nuevo con un nuevo lote de harina sobre un quemador próximo, ya sea en la próxima configuración más alta o más baja, dependiendo del resultado inicial.

Prueba de la mano

Pon a prueba tu quemador de la estufa eléctrica utilizando el mismo método que se usa para determinar la temperatura de una parrilla de carbón. Pon tu mano 2 pulgadas (5 cm) por encima de la bandeja que vas a cocinar y cuenta los segundos lentamente. La posición intermedia en un quemador debe producir suficiente calor como para hacerte retirar la mano después de tres segundos a una temperatura entre 325 y 400 grados Fahrenheit.

Termómetro

Para una lectura más precisa de la temperatura en el quemador de la cocina, usa un termómetro para freír. El agua nunca alcanzará una temperatura mayor a 212 grados Fahrenheit, que es la temperatura a la que el agua hierve, pero el aceite se calienta a 350 grados Fahrenheit. Calienta una olla llena de aceite hasta la mitad, a fuego medio durante cinco minutos para asegurarte de que el quemador haya alcanzado su temperatura más alta. Inserta un termómetro de fritura en el aceite para obtener una lectura precisa de la temperatura y ajusta el quemador en consecuencia para llegar a 350 grados Fahrenheit.

Prueba de pan

Todavía puedes medir la temperatura del aceite sin un termómetro, pero los resultados no serán tan precisos. Corta un cubo de 1 pulgada (2,4 cm) de pan y colócalo en una olla de aceite precalentado a fuego medio. Si el cubo está dorado después de un minuto, el aceite está entre 350 y 375 grados Fahrenheit. Si se dora demasiado rápido, el aceite está demasiado caliente y el ajuste del quemador debe reducirse. Un cubo que no vira al marrón en un minuto, significa que está demasiado frío. Gira la hornilla para aumentar el calor e intenta nuevamente con un segundo pan, colocado en un aceite precalentado por cinco minutos.