¿Cómo eliminar el olor a humo en una habitación que viene de la chimenea?
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Los troncos de madera ardiendo en la chimenea brindan calidez y enriquecen el ambiente de una habitación. Si la chimenea funciona correctamente, debería haber poco o ningún olor molesto a humo y ceniza; sin embargo, quizá notes que el olor perdura mucho después de que el fuego se ha extinguido. Esto a menudo sucede porque las superficies porosas —como las cortinas y la tapicería — que quedan muy cerca de la chimenea, tienden a absorber los olores, mientras que las paredes llegan a desarrollar una capa de hollín. Para acabar con el problema, debes atender todas las superficies afectadas.
Step 1
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Cepilla las paredes interiores y el suelo de la chimenea para eliminar cenizas y restos de creosota que causen el olor a humo. Barre las partículas de hollín y suciedad en un recogedor y deséchalas en la basura.
Step 2
Moja un cepillo para fregar en un cubo con un cuarto de galón (1 litro) de vinagre blanco. Friega las paredes internas y el piso de la chimenea con esta solución para limpiar y neutralizar el olor a humo. Deja secar al aire.
Step 3
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Vierte una taza de amoniaco en un cubo limpio y llena con un galón (3,8 litros) de agua caliente. Lava las paredes cercanas y los muebles de superficie dura con esta solución para eliminar el olor del hollín y la ceniza. Enjuaga con un paño limpio y húmedo y luego deja que las superficies se sequen al aire.
Step 4
Espolvorea bicarbonato de sodio sobre la alfombra, los tapetes grandes y los muebles tapizados. Lo ideal es hacerlo durante la noche para que sea posible absorber el olor a cenizas. Aspira al día siguiente para recoger todo el bicarbonato.
Step 5
Llena un recipiente pequeño con vinagre blanco y colócalo en la habitación impregnada con el olor a humo. Deja el vinagre durante toda la noche en la habitación para neutralizar los residuos de olor.
Referencias
Consejos
- Coloca cáscaras secas de cítricos en el mostrador con los materiales que utilizas para encender la chimenea. Agrega unos pedazos de cáscaras secas encima de los troncos que quemarás dentro de la chimenea y enciende el fuego con un fósforo como de costumbre. Las cáscaras secas te ayudarán a encender el fuego, al mismo tiempo que refrescan la habitación.
- Abre las ventanas para que el aire fresco circule y desodorice el ambiente.
Advertencias
- Haz que tu chimenea reciba una limpieza profesional una vez al año para eliminar la acumulación de creosota y para asegurarte de que toda la instalación se encuentre en buen estado.
Sobre el autor
Mary Ylisela is a former teacher with a Bachelor of Arts in elementary education and mathematics. She has been a writer since 1996, specializing in business, fitness and education. Prior to teaching, Ylisela worked as a certified fitness instructor and a small-business owner.
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