Cuando un niño recibe la Primera Comunión, es costumbre invitar a amigos y familiares, tanto para la ceremonia como para la recepción que le sigue, para celebrar este importante paso en el crecimiento religioso del niño. Las invitaciones deben redactarse de una manera que reflejen la importancia del evento e incluir la hora, fecha y lugar de la ceremonia y de la recepción.

Versos de la Biblia

Incluye un versículo de la Biblia al comienzo o al final de tu invitación para enfatizar el significado religioso del evento. Entre los versos apropiados se encuentran Juan 6:51 y 6:56, Marcos 14:22-24, Mateo 26:26-28, Lucas 22:19-20, Salmo 23:1-3 y Salmo 91:4. Escógelo junto con tu hijo y pregúntale si él tiene un versículo, salmo u oración que preferíria incluir.

De parte de los padres

Redacta la invitación de tal manera que esté viniendo de tí y de tu cónyuge. Comienza con una invitación abierta a participar en la alegría de este día bendito, exprésalo en primera persona para que tus palabras sean cálidas. Coloca las palabras "Primera Comunión", así como el nombre de tu hijo, en la misma línea para resaltar su importancia. Coloca la ubicación, fecha y hora de la ceremonia, y luego haz lo mismo para la recepción. Termina con las firmas.

De parte del niño

Discute el texto de la invitación con tu hijo y pregúntale cómo le gustaría invitar a sus amigos y familiares para compartir con él la alegría de su Primera Comunión. Comienza con un caluroso saludo por parte del niño hacia la persona a la que se le envía la invitación, si tú estás escribiendo las invitaciones a mano en lugar de mandar hacer una impresión profesional, el saludo puede ser personalizado para cada invitado. Coloca las palabras "Primera Comunión" en la propia línea para que resalte. Coloca la ubicación, fecha y hora de la ceremonia y de la recepción, y luego termina con la firma del niño. Si la caligrafía de tu hijo es buena y legible, puede escribir él mismo todas las invitaciones, si no, basta con que solo firme.