Step 1

Frota la pintura con una barra de jabón en ambos lados de la tela. Lava el objeto en agua caliente para aflojar la pintura.

Step 2

Frota la pintura con más jabón y un cepillo para uñas si el tratamiento previo resulta inefectivo. Frota ambos lados de la pintura vigorosamente con el cepillo para sacar las partículas de pintura.

Step 3

Hierve una olla grande de agua en la estufa. Mezcla el agua hirviendo con jabón lavavajillas. Empapa el objeto manchado en el agua hirviendo hasta que el agua se enfríe. Saca el objeto del agua. Refriega la pintura con fuerza con el cepillo de uñas. Lávalo como de costumbre.

Step 4

Prueba una pequeña cantidad de acetona en la tela para ver la solidez de los colores. Si la acetona no daña la tela, entonces vierte una cantidad generosa sobre la pintura. Coloca una almohadilla de toallas de papel debajo del área pintada de la tela para absorber un poco de la acetona y ayudar a que esta se empape a través de los dos lados de la tela. Deja que la acetona se asiente por más o menos 20 minutos.

Step 5

Refriega la mancha con el cepillo de uñas para levantar las partículas de pintura de la ropa. Enjuaga la acetona con agua y lava el objeto como de costumbre.

Step 6

Vierte fluido de limpieza en seco sobre el área manchada como último recurso si ninguno de los otros métodos funciona. Este fluido es más eficaz para quitar las manchas a base de aceite que a base de agua. Deja que el fluido se asiente durante 10 minutos. Refriega el área con el cepillo. Enjuaga el fluido con agua y lávalo como de costumbre.