Compra una impresora. Las impresiones de imágenes en papel comestible pueden hacerse en cualquier tipo de impresora de inyección. Si tienes una que ya no utilizas, límpiala y ponla a trabajar. No intentes hacer estas impresiones con otro tipo de impresora regular. Si bien puedes utilizar cualquier impresora de inyección, debes asignar una exclusivamente para este uso. Asimismo, existe en el mercado escáner con impresora en el que puedes realizar tus impresiones sin utilizar una computadora.

Selecciona la imagen que trasladarás. Asegúrate de que quepa sin que tengas que editarla. Si el tamaño no es adecuado, porque es muy grande o muy pequeña, utiliza un programa de computación para edición de imágenes como Paint o GMP para acortarla o alargarla.

Instala la tinta comestible en la impresora. Este tipo de cartuchos de tinta se colocan de la misma manera que los regulares. Haz una prueba antes de imprimir la imagen para asegurarte de que los cartuchos están bien instalados.

Carga la impresora con papel comestible. El papel comestible incluye tipos de papel como el de galleta, el de arroz y hojas de papel para glasear. Las hojas para glasear son capas de glasé presionadas sobre un soporte plástico y son las más utilizadas para imprimir imágenes comestibles para pasteles.

Imprime la imagen. Utiliza tu computadora o el escáner con impresora e imprime la imagen que colocarás sobre el pastel. Este procedimiento es muy simple, pero probablemente deberás hacer varios intentos antes de obtener la imagen final. Cuando la impresión esté lista, colócala en una bolsa resellable y asegúrate de que no recibe luz directa.