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Planifica salidas de bajo perfil donde tu chico no se sienta presionado a ser el alma de la fiesta. Probablemente disfrute una tarde viendo una película más que una noche movida saliendo con un grupo grande de personas. Hagan cosas juntos que refuerce su autoestima, como preparar una rica comida.

Resiste la tentación de llenar obsesivamente los silencios con charlas. Los chicos tímidos se sienten cómodos sentándose contigo y disfrutando de tu compañía. De hecho, las personas tímidas se comparan desfavorablemente con las personas que salen, que son habladoras por lo que tu monólogo puede hacerlas sentir incómodas. En momentos tranquilos, toma su mano o sonríele. Pregúntale cosas sobre él (su libro favorito o recuerdos de su abuelo) que lo harán salir de su caparazón.

Preséntale a tus amigos y familia lentamente. Una cena tranquila con tus padres será menos intimidante para tu chico que una reunión familiar llena de primos y tu tío Bob con su desagradable voz alta. Invita a tu mejor amiga para jugar un mini golf contigo y tu chico, en lugar de llevarlo a su fiesta de cumpleaños. Ayúdalo a que se abra con tus seres queridos; dile a tu familia que es un guitarrista experto en lugar de esperar que él voluntariamente de esa información.

Sé paciente y bríndale apoyo en las reuniones sociales. Toma su mano para darle seguridad en tu fiesta de oficina y abstente de insistir sobre su timidez. Evita comentarios como "No le dijiste nada a mi padre", ya que es algo destructivo y lo hará sentir incómodo.

Dale fuerza con comentarios positivos. Dile cosas como "Todos mis amigos deliraban sobre lo encantador que eres", así él se sentirá aceptado y querido. Elógialo a menudo. Dile que hoy luce guapo o que realmente aprecias cómo te ayudó con tu automóvil. Los cumplidos contrarrestarán los sentimientos de incomodidad y lo harán sentir amado y apreciado.