Motor

El motor es un mecanismo eléctrico que hace que gire la varilla. Este tipo de sistemas miden la velocidad en término de revoluciones por minuto, o sea la frecuencia con la que la vara gira dentro de un minuto. Antes de la llegada de los motores eléctricos, había que hacer todo el proceso manualmente con una manivela.

Carnes grandes o pequeñas

La velocidad apropiada depende en gran medida de la cantidad de carne que se pone sobre la varilla o dentro de una canasta para el espiedo. Cuando cocines cantidades pequeñas, haz que el motor vaya de 4 a 6 RPM. Algunos ejemplos de estos cortes son las pechugas de pollo, las costillas, los filetes y las salchichas. Las piezas de mayor tamaño necesitan una velocidad menor, de entre 1 a 3 RPM. Los cerdos enteros y los asados son buenos ejemplos de cortes.

Ubicación

Aunque esté bien la velocidad, los cortes de carne se queman o se secan si no están bien puestos sobre la vara. Asegúrate de que la carne esté en el centro y equilibrada para lograr la forma de cocción más efectiva. Ata un pavo entero o unos pollos con un cordel de carnicero y evita un efecto que no quieras. Procura atar las alas y las patas para impedir que se tumben mientras se cocinan. Recorta cualquier exceso de cordel con unas tijeras.

Calor indirecto

Utiliza el calor indirecto cuando cocines con carbón o gas. El primero proporciona calor calentando las briquetas de carbón, mientras que el segundo utiliza gas natural o propano para comenzar el fuego. El calor indirecta necesita que acomodes la parrilla y la comida lejos del fuego. La velocidad de rotación es la misma que con los otros tipos de cocción, aunque se necesita más tiempo si es a carbón. Agrega carbón fresco cada 30 a 40 minutos para mantener el calor a la temperatura ideal. Si los hornillos de los hornos a gas están en la parte de adelante y de atrás del espiedo, es más fácil de centrar y equilibrar. Si están a los costados, pon el fuego bajo y coloca una cubeta de goteo para evitar que termine contaminando la comida.