El mundo del despertar

Relojes despertadores análogos

Este es el abuelo de los relojes despertadores. Los relojes despertadores análogos datan desde el siglo XVI, aunque no se patentaron y se generalizó su uso hasta finales del siglo XIX. La mayoría de los relojes análogos tienen un par de campanas metálicas en la parte superior, y un pequeño martillo entre ellas, el cual las golpea para producir el sonido que despierta a las personas. Debido a las propiedades acústicas de la alarma, la mayoría de relojes análogos son más ruidosos que sus contrapartes digitales, haciéndolos ideales para quien tiene sueño profundo.

Dentro del reloj análogo hay una serie de engranes accionados con baterías o electricidad. Estos engranes mueven las manecillas el reloj, usando una rueda oscilante que mantiene el tiempo constante. En el reloj de alarma hay una manecilla extra, típicamente más corta que la manecilla de las horas en el reloj. Esta manecilla puede ajustarse a través de una perilla en la parte posterior hasta alcanzar la hora en la que uno desea despertar. En este punto, el usuario deberá activar un interruptor para la alarma. Esto hace que un resorte se presione contra el mecanismo del martillo de las campanas. Cuando la manecilla de la hora alcanza el punto en el cual la manecilla de la alarma está puesta, el resorte se suelta y se libera la tensión, permitiendo que el martillo vibre contra las campanas, creando una fuerte cacofonía y por lo tanto despertándote.

Relojes despertadores digitales

Rastrear los componentes básicos de un reloj digital estaría mucho más allá del alcance de este artículo, pero basta decir que no hay resortes ni engranes. En lugar de ello, los relojes digitales confían en dispositivos electrónicos en lugar de maquinaria mecánica para hacer su trabajo. En lugar de un péndulo o una rueda oscilatoria, los relojes digitales usan una base electrónica para contar los segundos y mantener el tiempo preciso. En lugar de engranes, los relojes digitales usan lo que se conoce como contador y, por supuesto, el reloj usa una pantalla LED o LCD para desplegar los números en lugar de manecillas y una superficie entintada. Para el mecanismo de alarma por sí mismo, los relojes digitales usan un radio o la grabación de un sonido de alarma, el cual usualmente suena o pulsa.