Dolor de cuello o espalda en los perros

El dolor de espalda o cuello de tu perro podría ser resultado de intensos saltos o caídas.

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Los perros pueden tener dolor de espalda o de cuello por una variedad de causas. Podría venir de una lesión de saltar o caer, desde una infección que proviene de una mordida o lesiones, trastornos de la columna o cáncer. También es posible que el problema real sea en otra parte de su cuerpo, tal como un órgano interno, y el dolor pasa a la parte posterior. Algunos de los síntomas te harán saber que es hora de llevar a tu pequeño perro al veterinario para que lo revisen.

La falta de movimiento

Muchos perros pequeños son traviesos y enérgicos, con frecuencia saltando y corriendo en círculos. Si tu perro se niega a saltar o hacer cosas que normalmente hace, o evita correr, subir escaleras o caminar incluso, podría significar que está sufriendo dolor de espalda. El perro también puede tener dificultades para mover su cabeza, lo que podría indicar un cuello rígido o adolorido. En casos más severos, el perro puede ser incapaz de moverse en absoluto. Esto podría ser una parálisis o simplemente debilidad severa de la parte del cuerpo afectada. Estos síntomas requieren de atención profesional inmediata, debes evitar mover al animal tú mismo para no herirlo aún más.

Respuesta al dolor directo

Aunque los perros no puedan hablar contigo para hacerte saber lo que le duele, es posible que te las diga de otras maneras obvias. Los perros pequeños tienden a ser más rápidos para responder a un toque doloroso, si aúlla, tiene espasmos o muerde la mano cuando presionas a lo largo de su columna vertebral, es probable que tenga un dolor agudo de espalda. Comienza en la parte superior de la cabeza, y presiona suavemente el hueso. Continúa hacia abajo por el cuello y la columna vertebral con la mano, presionando directamente, pero con cuidado sobre el hueso a medida que avanza. Mira la cara de tu perro para una mueca de dolor o de queja que puede ser menos evidente en unos perros que en otros.

Comportamiento extraño sutil

Algunos perros son más difíciles de interpretar que otros, y tú tendrás que guiarte por comportamientos menos obvios de comprender si se encuentran con dolor. Tu perro pequeño puede esconderse en un rincón o debajo de la cama cuando no se siente bien. Puede sentarse con una postura extraña que pueda sugerir que no se siente como normalmente lo hace. También puede estar muy cansado o puede negarse a comer o ir al baño, comportamientos que manifiestan sutiles indicios de que algo anda mal. Presta mucha atención y trata de palpar el cuerpo para saber si hay dolor en la espalda o el cuello y visita al veterinario si no estás seguro.

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