Ácaros del polvo

Los ácaros del polvo están estrechamente relacionados con las arañas y las garrapatas. Estos parásitos son microscópicos, y prosperan en lugares cálidos y húmedos. Por lo general mueren cuando el nivel de humedad cae por debajo de 40 a 50 por ciento. Producen partículas de residuos y huevos, y continúan creciendo cuando tienen partículas para consumir, como la piel y la caspa. De acuerdo con el Centro de Salud de la Universidad de Oregon, los ácaros del polvo no propagan las enfermedades, no muerden ni viven en las personas. Sin embargo, son perjudiciales para las personas que son alérgicas a ellos. Comúnmente prosperan en las camas, colchones, alfombras y tapicería.

Alergias a los ácaros del polvo

Los síntomas más comunes de los ácaros del polvo son los estornudos, los ojos rojos y la nariz que moquea. Las alergias severas causadas por ellos pueden producir asma y dificultad para respirar. Pueden afectar tu vida y hacer que tu casa sea incómoda. Si sospechas que tienes una alergia a los ácaros del polvo, consulta con una clínica de alergias para que puedan realizar las pruebas adecuadas. Si tienes una alergia a estos parásitos, debes tomarte el tiempo para eliminarlos y evitarlos de tu habitación y de otras áreas de tu casa.

Aspirar

Los ácaros del polvo a menudo se desarrollan en los colchones, en la ropa de cama y en las almohadas, porque en ellos hay una gran cantidad de piel y caspa. Retira la ropa de cama y lávala con agua caliente a una temperatura de al menos 130 grados Fahrenheit (54 grados centígrados) para matar a los ácaros. Antes de aspirar los ácaros del polvo, debes limpiar el colchón con vapor para matarlos. Pasa un limpiador de vapor sobre el colchón, y sigue las instrucciones del fabricante cuidadosamente. Después de la limpieza con vapor, conecta una manguera de tapicería a una aspiradora y pásala sobre todos los lados del colchón.

Otros controles

Ponle fundas a las almohadas y una cubierta al colchón para proteger estos elementos de los ácaros del polvo. Disminuye la humedad en la habitación a menos del 50 por ciento colocando deshumidificadores al lado de tu cama. Deja que la cama se ventile y se seque todas las mañanas antes de hacer la cama para evitar que atrape la humedad. Lava la ropa semanalmente con agua caliente para matar los ácaros del polvo para que no se multipliquen. Coloca un filtro HEPA en una aspiradora para recoger las partículas de los ácaros del polvo para que no se dispersen de nuevo en el aire.