Las agendas escolares permiten a los estudiantes organizar su día. Crear una agenda escolar que incluya una variedad de secciones y espacio para recordatorios importantes puede dar a los estudiantes un lugar para establecer objetivos y tareas y actividades extracurriculares. Crea una agenda escolar para distribuir a los estudiantes en tu escuela (o para tus niños) en un programa de gráficos y luego hazlas imprimir en una imprenta o una compañía de materiales para oficina.

Calendario estacional

Desde la perspectiva estética, un diseño estacional para un calendario o planificador escolar ayudará a los estudiantes a planificar su rutina y actividades semanales de una estación a otra durante el año escolar. Usa un programa como Photoshop o InDesign para crear un planificador que ofrezca el espacio suficiente para una rutina diaria con lugar adicional para notas al pie en cada día. Agrega en tus agendas gráficos referentes a los cambios estacionales como divisores mensuales, o añadidos en cada página. Incluye datos importantes como períodos de vacaciones, inscripción, cambios de clases (para estudiantes universitarios) y actividades extracurriculares.

Enfoque en la escuela

Un calendario con enfoque en la escuela puede incluir fotos de los estudiantes trabajando en el salón de clases o haciendo un gol del triunfo en el campo de fútbol. Las fotos y gráficos pueden exhibir a tu escuela en particular, o ser imágenes más generales relacionadas con la escuela, como un baile escolar, un laboratorio de computación o una mochila. Incluye un bolsillo en la parte trasera de la agenda, donde los estudiantes puedan colocar cosas como sus informes escolares, hojas de tareas o una nota especial de un maestro halagándolos por los progresos que han hecho en una asignatura difícil.

Establecer objetivos personales

Otro enfoque para tu agenda escolar es una que pueda asistir a un estudiante en su superación. Agrega fotos o gráficos que representen diferentes tipos de objetivos y mejoras que se puedan hacer. Los objetivos pueden ser personales, como mejorar en una materia específica o aumentar la autoestima, o que tengan que ver con motivación exterior, como planificar el tiempo para un voluntariado en una obra de caridad local o ayudar a otros estudiantes. Los recordatorios para objetivos diarios más generales pueden lograrse agregando una frase sobre ese objetivo, como ser más cortés, en cada página de la agenda o al principio de cada nuevo mes.