Step 1

Evalúa el embalaje original donde se encuentran los alimentos congelados. Asegúrate de que no haya agujeros en la bolsa o caja y de que esté completamente sellada. Cuanto más estrechamente sellado esté el alimento, más tiempo permanecerá congelado sin ningún problema. Si hay algunos sellos rotos, agujeros en la bolsa o desgarros en la caja, ponlo en otra bolsa o recipiente pequeño de plástico para asegurarte de que se mantenga más frío. Además de ponerle un envoltorio adicional, pon una capa de plástico transparente alrededor en caso de que haya pérdidas.

Step 2

Envuelve el paquete entero de los alimentos en papel de periódico. Toma algunas hojas de periódico y alinéalas juntas de manera uniforme. Coloca el paquete de comida en el centro y envuélvelo como si estuvieras envolviendo un regalo. Coloca cinta en los bordes. El diario mantendrá más fríos los alimentos y actuará como aislante. Sin embargo, si se van a mantener los productos en hielo durante el viaje, coloca todo el paquete en una bolsa para que el agua no penetre a través del diario.

Step 3

Utiliza una bolsa aislante o un refrigerador para transportar los alimentos. Si las cantidades son grandes, vas a viajar una distancia muy larga o llevas alimentos muy perecederos es mejor transportarlos en una nevera con hielo a su alrededor. Una bolsa aislante es mejor para llevar un par de artículos pequeños de comida que recorran distancias cortas y no necesiten estar en hielo. Asegúrate de sellar completamente el refrigerador o la bolsa aislada para viajar. Cualquier tipo de calor que entre en el refrigerador o en la bolsa puede hacer que la comida comience a descongelarse.

Step 4

Pon el refrigerador o la bolsa aislada en un lugar apropiado en tu coche. Los refrigeradores deben estar en una superficie plana en un coche, así que no hay ninguna posibilidad de que se abran. Las bolsas aisladas deben estar en una superficie en un vehículo donde no haya posibilidad de que resbalen o se vuelquen. Asegúrate de que se encuentren fuera de la luz solar directa, preferentemente cubiertos con una manta hasta que llegues a tu destino.