Step 1

Coloca un ventilador justo en el extremo opuesto de una puerta o ventana. Esto creará el flujo de aire más eficiente de un lado del cuarto al otro.

Step 2

Coloca un ventilador con el frente dirigido hacia las áreas húmedas, como lavabos y baños asegurándote de que quede a 1 metro (36 pulgs.) de donde se genera la humedad para una máxima reducción de ésta.

Step 3

Coloca un ventilador en un cuarto seco dirigido hacia un baño o cocina y simultáneamente coloca un segundo ventilador de frente a una ventana. Esta posición asegurará que el aire seco circule dentro de un cuarto más húmedo y el aire húmedo circule a través del segundo ventilador.