Dos formas de dispersar semillas y polen

El centro oscuro y los petalos amarillos brillantes del girasol atraen a los polinizadores.

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Las plantas evolucionaron a partir de primitivas algas verdes hace millones de años. Con el tiempo, las plantas se adaptaron a la tierra; para esto desarrollaron diversas características y funciones que permitieron la supervivencia de la especie. Ciertas características de las flores, como su forma, aumentan las posibilidades de polinización. Una de las estrategias evolutivas más efectivas es la dispersión de semillas, razón por la cual las nuevas plantas no compiten con sus padres por sol, agua, suelo y nutrientes.

Dispersión de semillas

El viento es una de las medios más efectivos que las plantas utilizan para dispersar las semillas. Por ejemplo, una ráfaga de viento puede transportar cientos de miles de semillas de dientes de león de un campo al otro. Las plantas que utilizan al viento para dispersar semillas desarrollaron, con el tiempo, algunas características específicas, produjeron semillas livianas para que el viento las pueda arrastrar con facilidad, como es el caso de muchas hierbas. Otras plantas, como los dientes de león, se adaptaron y producen semillas cubiertas como una especie de pluma que actúa como paracaídas en el viento; mientras que otras, como el caoba, producen semillas que se ven y actúan como el rotor de un helicóptero y que puede girar y desplazarse.

Animales y cortezas espinosas

Las plantas también utilizan los animales para transferir sus semillas a nuevos lugares y producen semillas que son transportadas por los animales. Estas plantas, como las rosas y bayas, producen frutos que atraen a los animales. Después de que los animales consumen la fruta, las semillas atraviesan el tracto digestivo y son devueltas por el animal o depositadas sobre el suelo a través de las heces. Otras semillas poseen ganchos, púas y una corteza espinosa, como el borde del perejil o harpagófito. Estas semillas se pegan al cuero del animal o a la ropa de la persona en un campo y son trasportadas a otro lugar cientos de yardas o millas más allá. La característica que permite que las semillas se peguen o "arrastren" en animales y humanos probablemente tuvo su origen en un accidente fortuito. Una planta individual probablemente mutada, provocó cambios en la corteza de la semilla que la hizo más áspera o cubierta con pequeños ganchos.

Polinización por el viento

Las flores en ocasiones son polinizadas por el viento. Las plantas polinizadas por el viento son usualmente verdes, pequeñas y no tienen pétalos. A diferencia de otras plantas que atraen polinizadores animales, no utilizan su energía para producir pétalos o pigmentación. Debido a que la cantidad de viento varia, estas plantas producen abundantes flores con el estigma expuesto y anteras cubiertas de polen. Las flores del arce azucarero (Acer saccharum) no tienen pétalos y cuelgan boca abajo para el que viento vuele el polen. Las hierbas poseen muchas flores por encima de la hierba en donde existen más probabilidades de que pase el viento.

Polinización animal

Durante millones de años, las plantas han evolucionado junto con los animales para aumentar las probabilidades de polinización. Las plantas han desarrollaron flores atractivas para los polinizadores con colores, formas y aromas atractivos; nutrición del néctar, ceras, o el polen en sí mismo; y las estructuras pueden simular comportamiento de cruce. Los polinizadores como las abejas saben cómo encontrar y entrar en especies particulares de flores. Las abejas, a diferencia de otros insectos, pueden arreglarselas para entrar en flores con muchos pétalos o muy cerradas. Las flores polinizadas por las abejas usualmente poseen pétalos anchos en los que las abejas se posan. Las flores tubulares, como las digitales, poseen anteras con polen que se ubican por encima de los pétalos para cubrir la espalda de las abejas cuando ingresan.

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