Cómo limpiar el hollín de una chimenea de ladrillo
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La chimenea no sólo sirve como fuente de calor sino también para decorar la casa, pero las manchas causadas por el hollín pueden verse muy mal. Las manchas pueden dejar un horrible tizne negro en el ladrillo, pero afortunadamente no es tan permanente como parece. Hay varias maneras muy efectivas para eliminarlo.
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Presiona la plastilina o algún otro tipo de masa para moldear sobre el hollín y simplemente levántala. Si la mancha es pequeña, este es probablemente el método más fácil. Asegúrate de usar plastilina de color claro y ten cuidado con los ladrillos viejos para que no se partan y se dañe la chimenea.
Echa sal al fuego. Unas pocas cucharaditas de sal ayudarán al fuego a convertir las manchas de hollín en humo y las sacarán fuera del ladrillo a través de la chimenea.
Mezcla lavavajillas Dawn y agua caliente. Aplica esto a la mancha y deja reposar por un minuto o dos. Usa un cepillo para quitar la mancha, enjuaga y deja secar. Repite si es necesario.
Combina 1 onza sal, 1 onza de detergente y agua hasta obtener una pasta. Aplica esto al área manchada y remuévela con un cepillo de alambre duro cuando esté seca.
Consejos
- Puedes comprar varios productos de limpieza en el mercado que pueden hacer la misma cosa. Brick Anew, Quick ''n Brite y cualquier limpiador de horno te ayudarán a eliminar las manchas de hollín, si no te importan los productos químicos. Asegúrate de leer y de seguir atentamente las instrucciones de cada producto.
Advertencias
- Puede ser una buena idea probar la durabilidad de los ladrillos antes de realizar un lavado vigoroso. Los ladrillos viejos pueden derrumbarse, así que prueba el método que escogiste en un área pequeña y mira cómo se sostiene. Puede que tengas que ajustar tu método de limpieza de acuerdo con la estabilidad de los ladrillos para no dañar la chimenea.
Sobre el autor
Melynda Sorrels spent 10 years in the military working in different capacities of the medical field, including dental assisting, health services administration, decontamination and urgent medical care. Awarded the National Guardsman’s Medal for Lifesaving efforts in 2002, Sorrels was also a nominee for a Red Cross Award and a certified EMT-B for four years.
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