Cómo limpiar un piso laminado y dejarlo sin rayas

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Los pisos laminados son duraderos, vienen en una variedad de colores y diseños, y lo mejor de todo es que son fáciles de limpiar. Son una gran opción para un bajo mantenimiento del piso. Aunque puedes gastar una fortuna en diferentes productos de limpieza que pueden dejar marcas químicas, limpiar tu piso laminado para que quede brillante y sin vetas se puede hacer usando solamente artículos que se encuentran en tu hogar, gracias a la superficie no porosa del laminado y las cualidades resistentes a las manchas.
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Mezcla un galón de agua tibia con dos o tres cucharadas de vinagre de uso doméstico. Vierte la mezcla en una botella con rociador. Si tu piso está demasiado sucio, puedes usar hasta cuatro cucharadas de vinagre, pero si pones mucha cantidad puedes dejar un olor desagradable en la habitación.
Rocía el limpiador casero directamente en el suelo y usa un trapeador para fregarlo. La suciedad y la mugre deberían salir con facilidad, y no se tendrían que ver rayas.
Enjuaga el trapeador con agua tibia y pásalo nuevamente por el suelo para levantar todos los residuos que falten.
Deja que el piso se seque solo.
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Consejos
- Es importante barrer o aspirar antes de comenzar a fregar, para no arrastrar partículas de polvo o suciedad en el suelo mientras lo estás limpiando.
- Si tienes algunas manchas difíciles, puedes rociar un limpiador adicional directamente sobre la mancha y usar una esponja para limpiarla.
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