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¿Qué es la ovoscopia?
Photodisc/Photodisc/Getty Images
La técnica en la que se mantiene una luz brillante por encima o por debajo de un huevo para estudiar el crecimiento y el desarrollo de un embrión es conocido como "ovoscopía". Se realiza en una habitación a oscuras con la lámpara de examen a trasluz. La lámpara tiene un bulbo eléctrico fuerte encerrado en un recipiente de plástico o de aluminio con un mango y una abertura. Se coloca el huevo en contra de esta abertura y se enciende la bombilla. En caso de que no tengas una la lámpara puedes usar una linterna. Por lo general, la inspección debe realizarse de cinco a siete días después de que los huevos son incubados.
Propósito
La ovoscopia permite detectar los huevos saludables y descartar aquellos infértiles que poseen anomalías, manchas de sangre, manchas de carne y cáscaras de huevo rotas. No daña el embrión a menos que el huevo se caliente demasiado. Si el huevo aparenta claro o posee grietas en la cáscara, puedes descartarlo. Por lo general, el embrión aparece como una sombra oscura con la cabeza como una mancha cuando los observas a trasluz. Los embriones sanos responden a la luz y y muestran movimiento. Si el mismo es lento y tarda unos 30 a 40 segundos, desecha el huevo, ya que el desarrollo del embrión no es saludable.
Presta atención a los vasos sanguíneos. A diferencia de un embrión sano, en los embriones dañados los vasos sanguíneos no están bien definidos, son sólo estrías que aparecen debajo de la cáscara. Notarás un área pequeña y oscura con vasos sanguíneos degenerando en caso de muerte prematura. Esto puede aparecer como un anillo oscuro alrededor del huevo. Las muertes tardías y los embriones viables en la misma fase de crecimiento, tienen un aspecto similar excepto por la ausencia de movimiento y los vasos sanguíneos deteriorados.
Marca el saco de aire y el sitio de inoculación antes de poner los huevos en la incubadora. Desecha los huevos infértiles o malos, ya que pueden explotar y contaminar otros huevos.
Realiza tu propia lámpara para ovoscopia
Coloca una bombilla muy brillante que no genere mucho calor en el interior de la caja de cartón. Corta un pequeño agujero redondo en la parte superior de la caja. El agujero debe ser lo suficientemente grande como para apoyar la punta de un huevo. Coloca el huevo en una posición inclinada en el orificio, y enciende la bombilla. El interior del huevo se hace visible una vez que la luz penetra en la cáscara. Ahora puedes identificar los huevos fértiles de los infértiles. Pon la lámpara sobre una mesa o una caja a una altura de 38 a 44 pulgadas (97 a 112 centímetros) del suelo para evitar que la luz incida directamente en tus ojos.
Ovoscopia en huevos de cáscara marrón
Los huevos blancos son más fáciles de observar que los de color marrón. Obtén una fuente de luz lo más brillante posible para poder ver a través del huevo de cáscara oscura. Por lo general, es posible que tengas que esperar un poco más para ver el embrión en comparación con la cáscara de un huevo blanco.
Ovoscopia de huevos incubados artificialmente
Los huevos incubados artificialmente se observan a trasluz para determinar la viabilidad, el crecimiento y el desarrollo del embrión. Comprueba los huevos blancos en el tercer día y los de cáscara marrón en el sexto día para constatar fertilidad. Sin embargo, lo mejor es poner a prueba los huevos después de la primera semana, la cual es la fase más crítica de la incubación y da más garantías sobre la fertilidad. Hazlo frecuentemente para asegurar un buen desarrollo del embrión. Recuerda realizar la observación durante las primeras etapas de la incubación, de lo contrario no serás capaz de distinguir entre las diversas etapas del huevo.
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Referencias
Créditos fotográficos
Photodisc/Photodisc/Getty Images