Step 1

Retira la suciedad del cuero. Límpialo con una esponja limpia humedecida con agua tibia. Retira los restos de agua con un pañal de trapo o una camiseta vieja. Si alguna superficie permanece manchada o sucia, mezcla 2 cucharadas de detergente de ropa líquido con una taza de agua fría o tibia. Aplica la mezcla en la chaqueta de cuero con una esponja. Retira los residuos de jabón con una camiseta vieja mojada con agua tibia o fría.

Step 2

Cubre cualquier arañazo con crema para lustrar. Para las chaquetas hechas con cuero suave y acabado, restriega la crema en el cuero. Usa un tono de crema que sea exacto al color del cuero de la chaqueta. Para chaquetas ligeramente coloreadas, usa una pasta para lustrar neutra, y aplícala con una gasa o con un pañal.

Step 3

Usa un trapo seco para limpiar el cuero sin acabado. Si le aplicas agua fría o tibia con una esponja, el cuero sin tratar se manchará. Para manchas difíciles o arañazos profundos, pasa sobre las marcas visibles el papel de lija ultrafino.

Step 4

Hidrata tu chaqueta de cuero. Para recuperar los aceites perdidos, trata la chaqueta con un limpiador líquido para cuero.

Step 5

Dale brillo a tu chaqueta con un trapo de cuero previamente humedecido. Para agregar brillo restriega una pasta hecha con silicona o aceite de visón. Usa un pañal de bebé o un trapo viejo para aplicar estos productos. Sácale brillo a tu chaqueta con un paño limpio y seco.