Cómo quitar el óxido a un wok

Ablestock.com/AbleStock.com/Getty Images
Curar un wok consiste en el proceso de quemar aceite dentro de éste repetidamente. Como resultado, las capas de aceite forman un recubrimiento que protege tu wok del herrumbre y hace que sea antiadherente. Un wok incorrectamente curado, o uno que nunca haya sido curado en absoluto, puede oxidarse. Puedes solucionar ésto, pero si el herrumbre se encuentra dentro del mismo, cualquier proceso de curado que hayas hecho se echará a perder y tendrás que empezar de nuevo.
Step 1
Humedece tu esponja de lana de acero con agua caliente, y luego utilízala para limpiar todo el wok. Concéntrate especialmente en las secciones que muestren signos de herrumbre.
Step 2
Agrega un poco de jabón si la herrumbre es resistente y no sale con agua sola. Continúa frotando el wok con la lana de acero hasta que todos los signos de herrumbre se hayan eliminado. Si tu wok tenía una pátina, verás que también ésta desaparece.
Step 3
Enjuaga el wok con agua caliente para eliminar los restos de jabón o herrumbre. Sécalo inmediatamente con un paño suave.
Referencias
Recursos
Consejos
- Vuelve a curar tu wok inmediatamente después de fregar el óxido. Para ello, recubre su interior con una capa fina de grasa de cerdo, que es la grasa utilizada tradicionalmente para curar woks, o usa un aceite con un alto punto de humo, como el de cacahuete o canola. Calienta el wok a fuego elevado durante varios minutos y extiende el aceite de manera uniforme en su interior inclinando el recipiente. Deja enfriar el wok y limpia cualquier resto de aceite. Repite este proceso varias veces. Tu wok debería comenzar a oscurecerse después de varias repeticiones.
Sobre el autor
Morgan O'Connor has been writing professionally since 2005. Her experience includes articles on various aspects of the health-insurance industry for health-care newsletters distributed to hospitals as well as articles on both international and domestic travel.
Créditos fotográficos
Ablestock.com/AbleStock.com/Getty Images