Las subetapas de las habilidades sensomotoras

Mediante ensayo y error, el niño desarrolla la habilidad de encontrar y succionar voluntariamente sus dedos en el desarrollo de las reacciones circulares primarias.

infant, baby image by Natalja from Fotolia.com

Jean Piaget, una psicóloga del desarrollo, se la acredita con generar la teoría del desarrollo cognitivo, que se enfoca en por qué los niños ajustan su propia comprensión a medida que exploran y aprenden sobre el mundo. Piaget propuso que los niños aprenden y se desarrollan cognitivamente mediante un ciclo continuo de acomodación y asimilación de sus esquemas mentales. La teoría de Piaget del desarrollo cognitivo consiste de cuatro estados principales: pensamiento sensormotor, preoperacional, operacional concreto y operacional formal. La primera de estas etapas, la sensomotora, sólo abarca los dos primeros años de vida pero consiste de seis subetapas en las cuales el niño comienza a desarrollar habilidades que formarán las fundaciones para los estados de desarrollo posterior.

Reflejos básicos

Al nacer, los infantes tienen reflejos uterinos, o instintos, como rotar y succionar. Estos reflejos son respuestas involuntarias al estimulo medioambiental.

Reacciones circulares primarias

Desde la edad de 6 semanas a 4 meses, los infantes gradualmente comienzan a ganar control de sus propias acciones corporales. Esto comienza al principio por accidente, con acciones como un infante que se encuentra la boca con la mano y comienza a chupar sus dedos. Mediante un proceso de ensayo y error el infante eventualmente repetirá la acción hasta que se convierte en un hábito que puede ser realizado voluntariamente.

Reacciones circulares secundarias

En la siguiente etapa de desarrollo, desde los 4 a los 9 meses, el descubrimiento comienza nuevamente por accidente y sigue mediante el proceso de ensayo y error con acciones que involucran los objetos externos del medio ambiente. Por ejemplo, un niño sentado en un columpio para rebotar patea sus piernas, activando las luces y música de la barra de actividades. Eventualmente, mediante ensayo y error, el infante aprende que patear producirá la acción deseada de encender las luces y reproducir la música.

Coordinación de esquemas secundarios

Desde los 9 a los 12 meses, el infante comienza a desarrollar el pensamiento lógico mediante patrones de intencionalmente unir dos esquemas para alcanzar una cierta meta y resolver un problema. En esta etapa, nuevos descubrimientos no son accidentales, sino intencionales. Al unir estos dos esquemas, un infante en esta etapa, ve un pocillo con cereal tras su taza, empujará la taza a un lado y alcanzará el cereal. Al combinar los hábitos esquemáticos de empujar y alcanzar logra alcanzar su meta de tomar el pocillo de cereales.

Reacciones circulares terciarias

Desde los 12 a los 18 meses, la curiosidad de un bebé sobre objetos en el medio ambiente produce exploraciones mediante el ensayo y error para hacer nuevos descubrimientos. Un bebé en esta etapa realiza experimentos sencillos para ver qué pasará o qué reacciones conseguirá con distintas variaciones de la misma actividad, como soltar objetos desde su sillita alta.

Transición al pensamiento simbólico

La etapa que va desde los 18 a los 24 meses marca el comienzo de la creatividad y pensamiento interno. Los niñitos en esta etapa comienzan a formarse representaciones simbólicas de eventos, pasando desde la necesidad de tener representaciones físicas de objetos y eventos para pensar sobre un problema.

eHow en espanol
×